Afirma que Moratinos "no dijo la verdad" en el Congreso y reclama que se suspenda el convenio bilateral si EEUU "no da explicaciones"
MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general de Izquierda Unida (IU) y presidente del Grupo Parlamentario de IU-ICV, Gaspar Llamazares, afirmó hoy que si en el caso de los vuelos de la CIA el Gobierno español miró "hacia otro lado", en el caso del uso de las bases militares en España está "ciego, mudo y sordo, como los monos de Gibraltar". Llamazares realizó esta afirmación a partir de las informaciones publicadas por un diario nacional que apunta que los registros de tráfico aéreo de Portugal han señalado que Estados Unidos usó sus bases en Torrejón, Morón y Rota para sus vuelos a Guantánamo.
En rueda de prensa en la sede de la coalición, indicó que ya se sabía que el Gobierno norteamericano "había incumplido" los convenios contra la tortura y se había "burlado" del convenio de Chicago sobre vuelos en aeropuertos civiles, y añadió que "ahora se sabe que también se ha burlado del convenio bilateral España-Estados Unidos con respecto a las bases de utilización conjunta".
Por tanto, subrayó que si no hay explicaciones estadounidenses, el Gobierno español debe "denunciar", debe "suspender" el convenio bilateral con los Estados Unidos, porque un convenio "tiene sentido en la medida en que las partes lo cumplen, pero está claro que el Gobierno norteamericano no le reconoce a España ninguna autoridad en su territorio y se burla de su soberanía y de las prescripciones del convenio".
Así, aseguró que el "escándalo es mayúsculo" porque el Gobierno norteamericano usa "ilegalmente" esas bases de utilización conjunta, que son soberanía española, mientras el Ejecutivo español "no hace nada". "No es de recibo que al final nuestras bases sean una caja negra donde los Estados Unidos maniobran en la oscuridad al margen del derecho internacional y del convenio bilateral favoreciendo la tortura", destacó.
En este sentido, apuntó que el ejército estadounidense ha actuado con la "pasividad" de las autoridades españoles y la "fe del carbonero" del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, quien en sus comparecencias ante el Congreso esgrimió esa "fe del carbonero" para decir que eran vuelos que "no vulneraban el convenio bilateral".
COMISIÓN PARLAMENTARIA DE INVESTIGACIÓN
Para Llamazares, "alguien ha mentido al ministro de Exteriores y como consecuencia, no se ha dicho la verdad en el Congreso", lo cual debería llegar a una comparecencia urgente del Gobierno ante el Congreso, "previa exigencia de aclaraciones a las autoridades norteamericanas". Añadió que este es un hecho "gravísimo, el hecho más grave de esta legislatura".
"Porque si bien Aznar participó en la guerra de Irak con la convicción de que existían armas de destrucción masiva solamente porque los Estados Unidos le decían que así era, el actual Gobierno ha tenido la misma credulidad, la misma falta de celo, con respecto a las bases españolas que tuvo el Gobierno de Aznar con respecto a la guerra", argumentó.
El líder de IU comentó que esta misma mañana firmó junto al Grupo Parlamentario Mixto la petición de comisión de investigación que ya anunció la pasada semana, al tiempo que insistió en que a raíz de las últimas afirmaciones, el Gobierno no puede seguir "mirando hacia otra parte", sino que tiene que investigar todo lo ocurrido en relación a estos vuelos, lo ocurrido con los vuelos de las bases en España, "informar de ello al Congreso y debe exigir explicaciones al Gobierno norteamericano".
Según dijo, aparte de esta petición, IU-ICV seguirá emplazando al Gobierno a que "aclare" esta situación, y señaló como "principal interpelado" al ministro de Defensa, José Antonio Alonso. En su opinión, éste tiene que pedir información, exigir el cumplimiento de la ley en territorio español y, "sólo después", hablar públicamente, porque ahora está "en entredicho la palabra de Alonso, la de Moratinos y la soberanía española en esas bases militares".
EL CONVENIO BILATERAL ES "PAPEL MOJADO"
A su juicio, en ello está en juego la soberanía española sobre su territorio y la legalidad de los convenios y del derecho internacional, al tiempo que está "en cuestión la palabra de Moratinos ante el Congreso". A este respecto reiteró que las últimas informaciones "desmienten" a Moratinos ante el Congreso, y apuntó que "éste o bien no sabía y confirmó que no había habido vuelos mediante la fe del carbonero, o si lo sabía, no dijo la verdad al Parlamento".
Llamazares subrayó que "está en cuestión la responsabilidad" del Ministerio de Defensa, la del director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Saiz, y la palabra de Moratinos, quien "a tenor de sus afirmaciones ante el Congreso, no dijo la verdad, bien porque le hayan engañado o porque no tenía información y asegurara que sí la tenía".
En su opinión, el Gobierno debe ir "más allá" de un desmentido por parte del ministro de Defensa, José Antonio Alonso, "que no tiene ninguna credibilidad, toda vez que es evidente que esos vuelos se han producido y el Gobierno no ha cumplido con su compromiso de exigencia de claridad a Estados Unidos, que ve el convenio bilateral como papel mojado".
"En estos momentos no hay bases de utilización conjunta, lo que hay son bases norteamericanas donde el Gobierno de EE.UU. hace de su capa un sayo, no tiene ninguna virtualidad la legislación española y se incumple de manera flagrante la legislación española y el convenio bilateral. España no existe en esas bases, que no son territorio español a la luz de cómo actúa el Gobierno norteamericano, que lo hace como si fueran bases exclusivamente suyas, vulnerando el derecho internacional y la legislación española", sentenció.
