López dice desconocer si hubo reunión con ETA y advierte de que "nunca se va a poner encima de la mesa precio político"

Actualizado: jueves, 18 enero 2007 12:45

Afirma que ETA ha sido quien ha "roto" el proceso de paz y "ha dado la espalda" a los presos

BILBAO, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PSE-EE, Patxi López, afirmó hoy desconocer si el Gobierno central y ETA se han reunido y en qué términos, y aseguró que, en cualquier caso, "nunca un Gobierno democrático va a poner encima de la mesa precio político con una banda terrorista".

De esta manera, el dirigente socialista se refirió en una entrevista concedida a RNE, recogida por Europa Press, a la información publicada por el diario Gara en la que asegura que representantes del Ejecutivo y de ETA se reunieron por última vez en la segunda quincena de diciembre y que, en ese encuentro, confirmaron el bloqueo del proceso y realizaron diferentes propuestas. Asimismo, el diario indica que se situó como elemento clave para desbloquear la situación el acuerdo entre las fuerzas vascas.

López aseguró desconocer si ha existido esa reunión "y mucho más el contenido", si bien afirmó que "nunca un Gobierno democrático va a poner encima de la mesa precio político con una banda terrorista".

El líder de los socialistas vascos recordó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ya señaló que "de lo único que se podía hablar con una banda terrorista en ese diálogo que él anunció que se podía abrir era del futuro de sus integrantes, por ejemplo de los presos".

POLÍTICA PENITENCIARIA

"Evidentemente todos habíamos entendido que, si ese camino hacia la paz avanzaba e iba por buenos derroteros, se podría hablar de flexibilidad en la política penitenciaria. Pero en caso de que el camino hacia la paz avanzara. Como esto no ha sido posible, la política penitenciaria tendrá que seguir siendo una pieza más de la política antiterrorista", añadió.

López destacó que es ETA "quien ha hecho que ese camino no avance" y que "se rompa" el proceso de paz, con lo que también "ha dado la espalda también a los presos, a sus integrantes, rompiendo la esperanza en el proceso de paz y, por tanto, de una política penitenciaria diferente".