El procesado dijo en comisaría que la mató porque le ponía "cuernos"
GIRONA, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
La madre de la joven asesinada en Figueres (Girona) en agosto de 2008 ha asegurado este martes durante el juicio que el acusado de matarla ya había amenazado a su hija y a ella misma con hacerles "daño", y que la víctima le insinuó un día que él había intentado estrangularla.
El juicio contra el acusado de matar a su expareja en Figueres Carlos C. la madrugada del 4 de agosto de 2008 ha realizado este martes su segunda sesión en la Audiencia de Girona con la declaración de familiares y amigos de la víctima, además de agentes de los Mossos d'Esquadra.
La primera en hacerlo ha sido la madre, quien ha asegurado entre sollozos que el procesado era violento y que amenazaba a la joven continuamente con dejar de pagar el coche para que ella tuviera que hacerse cargo de las letras, ya que era su avaladora.
"Al principio de la relación todo fue bien; incluso le cogí cariño. Llegué a tenerle cariño al asesino de mi hija", ha lamentado la madre.
La noche de los hechos, la víctima celebró una cena en su casa para presentar a su nuevo novio, un tal Lenin, una relación diferente a la que tuvo con el acusado: "Mi hija estaba iniciando una nueva relación y estuvo muy alegre toda la noche", ha contado la madre.
La joven no regresó a casa después de ir a bailar a una discoteca de La Jonquera, y la madre, preocupada, empezó a llamarla al teléfono pero lo tenía apagado, por lo que contactó con la madre de un joven que también había ido de fiesta con ella, y le dijo que su hijo sí había llegado, y fue este joven quien les comentó que, cuando la dejó en casa, el ahora procesado le seguía con el coche.
Entonces la madre de la víctima estuvo llamando al acusado, fue a buscarlo al trabajo y también a su casa, y, al no encontrarle, fue a poner una denuncia en comisaría, pero no fue hasta 24 horas después de la denuncia cuando el acusado se entregó a los Mossos d'Esquadra y cuando la madre descubrió lo ocurrido: "Pensé que la habría pegado, pero nunca imaginé que me la habría matado".
El chico que salió de fiesta con la víctima la noche de los hechos ha explicado ante el jurado popular que, cuando se dio cuenta de que el acusado iba detrás de ellos, le preguntó qué pasaba, y ella respondió que ya no estaban juntos, que él estaba celoso y que intentaría hablar con él para que se tranquilizara.
"YA SABÉIS QUIÉN SOY. VENGO A ENTREGARME"
En la sesión de este martes por la mañana también han declarado como testigos agentes de los Mossos d'Esquadra, incluidos los que estaban en la comisaría de Figueres cuando el acusado se entregó: "El hombre nos dijo: 'Ya sabéis quién soy. Vengo a entregarme. He matado a mi exnovia porque me ponía los cuernos", ha detallado una cabo.
El agente que encontró el cadáver en el maletero del vehículo ha contado que estaba en una posición "antinatural", ya frío y sin pulso.
Antes de entregarse, el procesado llamó al 112; la llamada llegó a un mosso que intentó saber dónde se encontraban y cómo estaba la víctima: "Me dijo que la tenía en el maletero, que no respiraba desde hacía horas y que no tenía pulso; también que había quedado así a consecuencia de una pelea", ha expuesto.
GOLPEADA Y ESTRANGULADA
Todos han coincidido en señalar que el acusado estaba muy tranquilo, respondía a todo con coherencia y serenidad, y que incluso les aseguró ser muy consciente de lo que había hecho y que la había agredido para que le dijera con quién había estado, aunque nunca pensó que con un bote pudiera hacerle tanto daño.
En la vista oral del lunes por la tarde, el procesado había reconocido que mató a la chica después de golpearla con un bote de metal, darle puñetazos y, finalmente, estrangularla con el cinturón de ésta.
