El mafioso detenido en Barcelona dirige uno de los clanes más potentes de la Camorra

Europa Press Nacional
Actualizado: miércoles, 27 enero 2010 20:41

BARCELONA/ROMA 27 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Policía Nacional, la Policía italiana y la INTERPOL detuvieron hoy en Barcelona en una operación conjunta a Paolo di Mauro, considerado el 'número uno' de los Contini, uno de los tres clanes más potentes de la Camorra napolitana, según confirmaron a Europa Press fuentes policiales.

Di Mauro figuraba en la lista de los 30 fugitivos más peligrosos de Italia y se hallaba en búsqueda y captura desde el 2002, año en que había sido excarcelado por un problema burocrático.

En el momento de la detención, Di Mauro se encontraba junto a su socio Luigi Mocerino, que también figuraba entre los 100 fugitivos más buscados del país transalpino.

El arresto se produjo hacia las 14.30 horas en la calle Gelabert de la capital catalana, muy cerca de la Avenida Josep Tarradellas, después de que los detenidos mantuvieran una cita con un abogado. Según los investigadores, ambos vivían en Barcelona y en un primer momento exhibieron documentos falsos, aunque después se rindieron tras ser reconocidos por los agentes.

En la detención participaron el Grupo 5 del Crimen Organizado de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña, el grupo de fugitivos y la Policía italiana. En estos momentos, los detenidos se encuentran en las dependencias de la Policía Nacional en Via Laietana.

"Su detención supone un duro golpe a la Camorra, puesto que el clan Contini es uno de los más potentes", explicó una de las responsables de la Policía de Nápoles Cristiana Mandara, en declaraciones a Europa Press.

Di Mauro, de 58 años y conocido como 'el enfermero', era el actual regente del clan Contini al ser el heredero del jefe Eduardo Contini, actualmente detenido. Fugitivo desde el año 2002, sobre él pesa una pena de 24 años de cárcel que fue emitida por el Tribunal de Apelación de Nápoles en 2005.

Además de estar acusado de actividades de tipo mafioso tales como el tráfico de droga y de armas, se le imputa el homicidio de Francesco Mazzarella, que fue asesinado en 1998 a la salida de la cárcel de Poggioreale.

El clan Contini es uno de los más fuertes en el control del tráfico de drogas y otras actividades ilícitas en el centro de Nápoles, tales como la extorsión, la usura y el blanqueo de dinero.

A pesar de quedar decapitado tras el arresto del capo Contini y otro de sus principales exponentes, Patrizio Bosti, el clan consiguió mantener el control del territorio, gestionando enteros sectores empresariales y comerciales e incluso logrando la adjudicación de obras públicas.

Mocerino, en cambio, que se hallaba fugitivo desde el año 2008, era considerado el administrador económico de la organización. Según los investigadores, ambos conseguían introducir en España "ingentes cantidades de sustancias estupefacientes" procedentes de las costas marroquíes, según detalla un comunicado de la Policía de Nápoles.

El cuartel general de la organización había sido instituido en la vivienda de Mocerino, ubicada en el número 100 del Paseo de Bellavista de Castelldefels (Barcelona) y desde allí, la droga era transportada hasta Nápoles. En cada viaje, se estima que se trasladaban unos 1.000 kilos de droga.

En su nota, la Policía italiana destaca el "carácter transnacional" de la organización, tal y como demuestra la operación efectuada entre España e Italia el pasado mes de julio y en la que fueron secuestrados bienes por valor superior a los diez millones de euros.

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