Marín ya avisó en julio, cuando se habló de la vuelta de Bono, que no pensaba competir y que se buscaría otra salida

MADRID 15 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Congreso, Manuel Marín, ya dejó claro el pasado mes de julio, cuando se habló de que el ex ministro José Bono podía ser el candidato del PSOE para presidir la Cámara la próxima legislatura, que no pensaba "competir" por ese puesto y que, en su momento, se buscaría otra salida "no tan complicada" como la Presidencia de las Cortes.

Este mediodía Marín confirmará este vaticinio en Ciudad Real, su circunscripción electoral, donde tiene previsto anunciar que no volverá a ser diputado y que, tras las elecciones de marzo, se retirará de la primera línea política.

Aquel primero aviso se produjo después de las noticias que se publicaron en julio acerca de que el ex ministro José Bono habría aceptado la propuesta del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para ser cabeza de lista del PSOE por Toledo en las generales y, después, presidente del Congreso.

Marín ya dijo en julio que prefería mantenerse "al margen" de este tipo de especulaciones. "No estoy en este problema --recalcó--. Es una cuestión que se tiene que resolver entre Pepe (Bono), al cual aprecio mucho, y el presidente Zapatero, al cual aprecio mucho también".

YA HA TENIDO "BASTANTE".

Eso sí, quiso poner énfasis en su negativa a competir" por la Presidencia del Congreso: "Yo ya vengo diciendo desde hace bastante tiempo que yo ya estoy para que me quieran y no estoy para peleas ni para competir por puestos. Manolo Marín está pa' que le quieran y como yo ya tengo esta situación personal, no voy a disputar ningún puesto ni voy a competir con nadie", remarcó ante los periodistas.

Al volver a ser preguntado por su futuro personal, Marín fue aún más preciso: "Si yo puedo, y estoy en condiciones de tomar decisiones por mí mismo, buscaré salidas no tan complicadas como la que he tenido esta legislatura. Porque, ¡Dios mío, cómo ha sido esta legislatura!. Y yo con una legislatura tengo bastante --contestó--. No lo puedo decir más claro".

Marín, de 58 años, fue diputado del Congreso en las primeras legislaturas de la Transición, incluyendo la Constituyente, y después estuvo destinado en Europa, donde llegó a ser vicepresidente de la Comisión Europea. Regresó a la política española en el año 2000 y, con la victoria del PSOE en marzo de 2004, fue elegido presidente del Congreso.

Según aseguran en su entorno, Marín se irá del Congreso, siempre después de las próximas elecciones generales, con la "satisfacción" de haber sido un presidente del Parlamento "independiente", y en su haber quedará, entre otras cosas, el Plan de Modernización de la institución y la inmersión del Congreso en las nuevas tecnologías.