SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
El jefe del Ejecutivo autonómico, Alberto Núñez Feijóo, aseguró hoy que si él hubiese gestionado el secuestro del 'Alakrana' en vez de su homólogo en el Estado, José Luis Rodríguez Zapatero, se "preocuparía" por la vida de los marineros, "no mentiría" y hubiese apostado "por la vía diplomática antes que por la judicial".
"Pero no estaba en mi mano", señaló en la rueda de prensa posterior al Consejo de la Xunta, donde insistió en que su deber ahora es "ponerse a disposición de las familias" de los ocho gallegos liberados el pasado martes junto a otros 28 tripulantes del atunero tras 47 días secuestrados por piratas somalíes.
Acerca de si hubiese incluido contactos con el Estado somalí en su hipotética estrategia diplomática, el presidente gallego replicó que "eso lo debe saber el señor Moratinos" --en referencia al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos-- que, según recordó, negoció con autoridades de Kenia y Somalia.
Con todo, Feijóo insistió en que él "cumplió con su deber" durante los 47 días de secuestro y añadió que lo seguirá haciendo hasta que los marineros se reincorporen a su vida normal facilitándoles "la ayuda psicológica y sanitaria que necesiten" a través de los protocolos sellados en la reunión de la comisión autonómica de seguimiento, que se produjo ayer.
"LA VERDAD"
"La Xunta seguirá siendo fiel a sus prioridades", continuó el mandatario autonómico y situó entre ellas "reclamar la verdad" sobre lo ocurrido en el secuestro al Ejecutivo central. "Había que traerlos a casa y han venido, pero ahora le corresponde aclarar la verdad", advirtió y alertó de "cuestiones que ofrecen poca confianza y que parecen medias verdades".
"¿Por qué se criticó que la Justicia actuase conforme a lo que se le dictó? ¿Se intentó parar a los piratas? ¿Hubo malos tratos en el barco o no?", ejemplificó y respaldó la actuación de su partido, encabezado por Mariano Rajoy, quien pidió ayer la reprobación de tres de los miembros del Ejecutivo: la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega y los titulares de Defensa, Carmen Chacón, y de Justicia, Francisco Caamaño.
Al respecto, argumentó que la oposición en el Estado tiene "la obligación" de "controlar" al Gobierno y reiteró que "lo lógico" en un Estado de Derecho es que Rodríguez Zapatero "diga a toda España" qué tuvo que "ceder" y si hubo o no "disparos". "Son cuestiones imprescindibles", apostilló.
MEJORAR LA SEGURIDAD
En este contexto, repitió que el "deber" que tiene ahora el Gobierno gallego es "estar a disposición" de las familias y de los marineros, aunque incidió en que no tiene "ninguna intención" de "interrumpir la intimidad de las familias" tras el regreso, previsto para el sábado o el domingo.
"Ahora toca pensar lo que hacemos para mejorar la seguridad en el Índico", propuso y aseguró "tenerlo claro desde el primer día". "La Armada puede hacer un excelente trabajo, igual que en Afganistán o en otros lugares", dijo, si bien admitió que no puede ser "la solución definitiva". "Pero sí mientras dure la situación de crisis en estas aguas", concluyó.