PNV cree que en la campaña contra pintadas de ETA se cometen "excesos" que rayan la injerencia en política institucional

Actualizado: jueves, 9 julio 2009 17:21

No comprende que López "pueda cometer el desliz" de "dar a entender que, hasta ahora, ha habido espacios de impunidad"

BILBAO, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó hoy que "se están cometiendo excesos que pueden llevar incluso a la interpretación de injerencias en la política institucional", con la orden sobre la retirada de pintadas o carteles relacionados con ETA. Además, afirmó que no comprende que el lehendakari, Patxi López, "pueda cometer el desliz" de "dar a entender que, hasta ahora, ha habido espacios de impunidad".

Urkullu destacó que "el empeño de más de 30 años" de su partido en la deslegitimación de la violencia "tiene su reflejo en muchas iniciativas", como la Ley de Víctimas, de la que "han salido medidas que ahora se están poniendo en práctica". Asimismo, censuró que "se intente justificar lo injustificable en base a un falseamiento de la realidad".

En una entrevista concedida a Radio Popular, recogida por Europa Press, el dirigente jeltzale aseguró que en el PNV no están "mosqueados" por las afirmaciones que apuntan al impulso de la deslegitimación del terrorismo con el nuevo Gobierno vasco, aunque considera que no son "admisibles" ese tipo de "discursos".

Tras criticar lo afirmado, "por ejemplo, en colaboración policial en la lucha contra el terrorismo, de 'ahora sí, antes no'" o en relación a que el lehendakari, Patxi López, diera "a entender que hasta ahora había habido espacios de impunidad" en la manifestación de repulsa por el útimo atentado de ETA, reiteró que "eso no es admisible para el PNV", que según recordó "ha compartido responsabilidades de gobierno" con el PSE en el Ejecutivo vasco y "también en otras instituciones".

Por ello, dijo no entender que "el lehendakari pueda cometer ese desliz" y añadió que "mucho peor sería si hubiese sido intencionado, en esa necesidad de reforzar ese cambio que ha habido, aun no siendo la formación política ganadora".

Urkullu se refirió a la orden de Interior para la eliminación de pintadas y carteles y consideró, en este sentido, que "se están cometiendo excesos que pueden llevar incluso a interpretación de injerencias en la política institucional por parte del Gobierno en los ayuntamientos, en competencias municipales, y que se reconoce y hay ahora que matizar lo que ha sido ese decreto para suavizar los efectos que ha podido provocar".

"Me parece que es un ejercicio no muy constructivo para la imagen de la sociedad vasca que se intente justificar lo injustificable en base a un falseamiento de la realidad", afirmó el presidente del PNV, que lamentó que existe "una estrategia apoyada en una comunicación diseñada de cara a que los ciudadanos parezca que tenemos que tener una memoria de pez, que se nos olvida al día siguiente lo del día anterior".

De este modo, destacó que ha habido "una historia de más de 30 años de empeño del PNV", primero "en solitario" y posteriormente junto las otras formaciones políticas, que "tiene su reflejo en muchas iniciativas" desde los ayuntamientos y otras instituciones, y también "con legislación como la Ley de Víctimas del Terrorimo, como consecuencia de todo un trabajo parlamentario en complicidad con el retos de fuerzas políticas, salvo la autodenominada izquierda abertzale".

De esta ley, destacó, "han salido determinadas medidas que ahora se están poniendo en práctica". "Y ahí es donde yo no puedo permitir que haya un falseamiento de la realidad", añadió, insistiendo en que "la realidad de los últimos 31 años está ahí, la historia está ahí, y en todo caso más allá de lo que como cuñas de mensaje de comunición se intentan poner en circulación para justificar lo injustificable, está la ciudadanía, que es madura y el 1 de marzo nos dio los votos más que a otros partidos políticos".

Asimismo, preguntado por las discrepancias en materia antiterrorista, censuró los "planteamientos de unidad" en los que parece que "sirven para hoy, sirven para mañana en función de los intereses de unos o de otros", y sin "ningún encuentro entre partidos políticos para hablar de unidad".

"Son necesarios, yo entiendo, determinados protocolos. Yo mismo como presidente del PNV, ante las dudas de López, he abogado también, porque el PNV está dispuesto a hablar de todo y con todos los partidos políticos", incluidos la actuación de los partidos políticos contra el terrorismo o el compromiso con el respeto a los derechos humanos y las libertades civiles y políticas, apuntó.

De este modo, pidió "no jugar" con "esos conceptos de unidad, sin que haya habido previamente reuniones entre partidos políticos, sin que haya habido debates, las unidades parece que tienen que ser impuestas desde los intereses partidistas amplificados a través de los medios de comunicación".

"Y si alguien juega -advirtió- el empeño del PNV, desde un compromiso ético, moral y política para con la lucha contra el terrorismo y la lucha a favor de los derechos humanos y los derechos civiles y políticos, ahí está".

"PROVOCACIÓN" EN EL GORBEA

Por otro lado, se refirió a la polémica suscitada por las maniobras del Ejército en el Monte Gorbea y, preguntado si da mayor verosimilud a las informaciones que apuntan a que la colocación de la bandera española partió del CNI o a las explicaciones dadas por la vicepresidenta del Gobierno, replicó que "en ese caso a lo que dice Deia".

A su entender, "no es nada normal que un ejército haga ese tipo de maniobras, con esa ostentación". Tras denunciar la "provocación" que a su juicio supone, exigió "repeto a todo lo que supone una historia, que también corresponde a ese monte, como otros muchos lugares donde yacen cuerpos de personas que hace 70 años dieron su vida en favor de las libertades y de la democracia". "No en favor solamente de un pueblo, sino de las libertades y de la democracia", insistió.

Del mismo modo, dijo no entender que "aquí haya provocaciones como la del ejército español pensando que Euskadi es un islote como Perejil" y censuró la "ostentación, a modo de provocación, con una enseña que no es la más querida en el conjunto de la sociedad vasca, que tiene su propia enseña, que es la ikurriña".

El presidente del PNV opinó que lo sucedido es "una manifiesta provocación" porque "no hace falta saber que el ejército responde a los dictados del Gobierno, es uno de los poderes del Estado español, como para que además tengan que hacerse una muestra con base a una bandera, que si no estoy muy equivocado no era la bandera constitucional".