La candidata, que venderá el mensaje de que el cambio empieza en Cataluña, espera convertirse en tercera fuerza política
MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El PP catalán quiere que el presidente nacional del partido, Mariano Rajoy, se vuelque en las elecciones catalanas de este año, con una intensa agenda que incluya actos paralelos a los de la candidata a la Generalitat, Alicia Sánchez-Camacho. El objetivo es que Rajoy se instale en esta comunidad el último mes de campaña, repitiendo así el modelo gallego que ayudó a Alberto Núñez Feijóo a recuperar la Xunta, informaron a Europa Press fuentes 'populares'.
Conscientes de que en Cataluña son ahora la cuarta fuerza política, aunque con la aspiración de convertirse en tercera, los populares catalanes pretenden que la implicación de Rajoy les ayude a acabar con los intentos de campaña bipartidista por parte del PSC o CiU y conseguir llevar su mensaje a mucha más gente.
En estos primeros meses, persiguen que el líder de los 'populares' se desplace cada mes a Cataluña, unas visitas que irán 'in crescendo' conforme se acerque la cita con las urnas. De hecho, incluso prevén caravanas paralelas en la recta final de campaña, con algunos actos conjuntos.
El modelo gallego servirá de guía para el PP de Sánchez-Camacho, que lidera el partido desde julio de 2008. En los comicios gallegos, Rajoy organizó su propia caravana electoral, con la que recorrió alrededor de siete mil kilómetros, visitando más de cuarenta municipios de Galicia y haciendo algunas incursiones al País Vasco, donde también había elecciones.
Al PP catalán le gustaría importar este modelo, pero también espera contar con la participación de los presidentes autonómicos del partido, en especial Feijóo y Antonio Basagoiti, con los que Sánchez-Camacho guarda una estrecha relación.
EL CAMBIO EMPIEZA EN CATALUÑA
La candidata del PP a la Generalitat quiere vender el mensaje de que el cambio en España empieza en Cataluña e incidirá en la idea de que con un partido nacional es cómo se pueden cambiar realmente las cosas, indicaron las mismas fuentes.
Además, Sánchez-Camacho aspira a arañar votos del área metropolitana de Barcelona, que en las elecciones suele dar su apoyo sobre todo a los socialistas y que en este momento pueden estar descontentos con la gestión de José Montilla, sobre todo en materia económica.
Para lograr su propósito seguirá promoviendo "la imagen de moderación" en la que ha trabajado el partido los dos últimos años para acabar con el "cordón sanitario" que, según los populares, sufrieron en el primer gobierno del tripartito a raíz del llamado 'Pacto de Tinell'.
En el PP están contentos con esta labor porque las encuestas internas que maneja el partido han reducido el rechazo que el PP catalán despertaba hace unos años entre los ciudadanos de esta comunidad.
OBJETIVO: SER LA TERCERA FUERZA
La meta del PP catalán en las próximas elecciones es convertirse en la tercera fuerza política y ser decisivos en la formación de Gobierno. Así lo recalcó el propio Mariano Rajoy hace un par de semanas ante los miembros de la Junta Directiva Nacional al asegurar que el objetivo es "contribuir a propiciar un cambio político en Cataluña y ser decisivos".
Y para ello, prosiguió Rajoy, el mensaje será "dar prioridad a los problemas reales" de la gente, como el paro, la inseguridad o la inmigración. "Los gobiernos están para resolver problemas, no para crear problemas --enfatizó--. Vamos a plantear un escenario de cuatro años de moderación, de sensatez y de atención a los problemas de la gente".
