SAN SEBASTIÁN, 3 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Elgoibar, Francisco J. Núñez, denunció hoy la actitud de "tibieza" del grupo municipal socialista por "inhibirse a la hora de rechazar una proposición de Aralar favorable a los presos etarras" en la que se reclama el fin de la dispersión de los reclusos.
Según explicó Núñez en un comunicado, el texto, respaldado por las firmas de 700 vecinos y asociaciones de la localidad guipuzcoana, fue debatido esta semana en Pleno y no salió adelante por la falta de apoyos.
El edil del PP se mostró "muy crítico" con el PSE porque "es la segunda vez que decide mantenerse al margen en mociones de este tipo" y recordó que en junio de 2008 el grupo socialista decidió abstenerse de votar otra moción presentada por el PNV "en similares términos, abogando por el fin de la dispersión de terroristas de ETA y pidiendo "respeto para los derechos humanos" con motivo de la enfermedad del recluso etarra Mikel Ibáñez".
"En aquella ocasión, tampoco participaron y argumentaron que estaban dispuestos a hablar, a reunirse y a comprometerse para buscar una solución al conflicto que actualmente existe y, por ello, afirmaban que cuando se les llamara acudirían a las reuniones fijadas para hablar de este tema", aseguró.
A juicio de Núñez, "en todo tiempo y lugar existen conflictos, pero en democracia se resuelven en los foros democráticos, en las tribunas y en los parlamentos, mediante el diálogo y la persuasión, no mediante la violencia y la imposición totalitaria a través del terror, que es a lo que se han dedicado esos terroristas que ahora están presos en la cárcel".
Para el concejal popular, "estos no son meros presos vascos, ni mucho menos presos políticos a quienes presuntamente el Estado español viola sus derechos civiles, como llega a sostener el PNV", sino que son "criminales organizados que saben muy bien a qué aspiran cuando utilizan los métodos conocidos del chantaje, la amenaza, la agresión o el tiro en la nuca".
De este modo, criticó que el PSE esté dispuesto a "seguir hablando con las víctimas como a hacerlo con sus verdugos", al tiempo que consideró que esta actitud "ni sirve para deslegitimar a ETA ni para hacer calar en la sociedad que la participación democrática tiene sus reglas, como la renuncia a los métodos violentos y a la imposición terrorista de las ideas".
