PALMA DE MALLORCA, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de UM, Miquel Nadal, expresó hoy su incomodidad por su imputación en el caso Can Domenge y afirmó que en estos momentos le entran ganas de "dejar la política", tal y como se lo ha pedido su familia, para dejar paso a gente "más joven" que no tenga una vinculación tan estrecha con etapas anteriores, marcadas por casos de corrupción que han salpicado a importantes cargos de este partido.
En los pasillos del Parlament, Nadal aseguró que UM se siente "perseguida" y confirmó que el presidente del Govern, Francesc Antich, que se encuentra hoy en Madrid, no le ha pedido su dimisión, pese a que, reiteró, su "ánimo" en estos momentos le empuja a "dejar la política", si bien "todos los miembros de mi partido me han dicho que no lo deje, ni tampoco ofrezca mi dimisión a Antich", recalcó el presidente de UM, quien ayer puso a disposición del partido sus cargos como conseller, concejal y presidente de UM.
En esta línea, Nadal, rodeado de una veintena de periodistas, enfatizó que "no tendría ningún inconveniente en presentar mi dimisión como conseller, pero en mi partido me han pedido que no lo haga". Por otro lado, reiteró que UM "se siente atacada y presionada", después de que la Fiscalía iniciara ayer una investigación en torno al proyecto de desdoblamiento de la carretera Palma-Manacor, el mismo día que hizo llegar a Nadal una citación para que declare como imputado por el caso Can Domenge.
A la pregunta de si dimitirá si Antich se lo pide de manera explícita, Nadal insistió en que en la próxima reunión del Consejo Político, que tendrá lugar la semana que viene, "volveré a poner todos mis cargos a disposición del máximo órgano partido".
