El presunto espía de Assange implica al Gobierno de Ecuador, que estaba preocupado porque se reunía con "delincuentes"

El propietario de Undercover Global, David Morales, tras comparecer a petición propia en la Audiencia Nacional por ser investigado por un supuesto espionaje al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en Madrid (España) a 7 de febrero de 2020
El propietario de Undercover Global, David Morales, tras comparecer a petición propia en la Audiencia Nacional por ser investigado por un supuesto espionaje al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en Madrid (España) a 7 de febrero de 2020 - Óscar Cañas - Europa Press
Actualizado: viernes, 7 febrero 2020 22:29

También acusa al fundador de Wikileaks de ser él quién colocaba métodos de vigilancia y de tratar de entorpecer su extradición a EEUU

MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

David Morales, principal investigado por el presunto espionaje a Julian Assange mientras estuvo asilado en la Embajada de Ecuador en Londres ha afirmado este viernes ante el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata que fue el propio Gobierno del país sudamericano el que le solicitó implantar métodos de escucha al estar preocupado porque el fundador de Wikileaks se reunía con "delincuentes".

Fuentes de la defensa han explicado al finalizar la comparecencia, que ha sido a petición propia y ha durado unas cuatro horas, Morales ha aportado a la causa que le investiga tanto a él como a su empresa, UC Global, copias de correos electrónicos del embajador ecuatoriano y otros cargos gubernamentales, así como de miembros de los servicios de inteligencia del país sudamericano planteándole la necesidad de colocar micrófonos o cámaras de vídeo ajenas al circuito oficial de la legación diplomática.

Según las fuentes consultadas, estos correos demuestran peticiones concretas del Gobierno de Ecuador, que alegaba que Assange estaba entrando en contacto con "delincuentes" como "terroristas o personas que podían perjudicar" al país y quería que se "cometiesen delitos" dentro de la embajada. Eso sí, Morales ha asegurado que como el fundador de Wikileaks cortó relaciones con esas personas, no se llegaron a implantar esos métodos de vigilancia.

El dueño de UC Global, empresa radicada en Jerez de la Frontera (Cádiz), ha aportado también a la causa imágenes captadas por el circuito oficial de cámaras de la embajada en las que se puede ver al propio Assange tratando de colocar micrófonos y cámaras diferentes a las ya existentes.

Además, Morales ha dicho al juez instructor que cualquier imagen que se captara en ese circuito oficial quedaba registrada y que él no era el único que podía disponer de ellas, sino que cualquier persona autorizada, como empleados de la legación diplomática, podían tener acceso a ellas y hacer copias.

UNA DECENA DE VIAJES EN 3 AÑOS

En cuando a la posibilidad de que Morales estuviese vendiendo información sobre Assange a los servicios de inteligencia de Estados Unidos, el investigado ha asegurado que todo es falso y que los viajes que realizó a ese país fueron para contactar con otros clientes de su empresa, pues UC Global ha prestado servicios para los gobiernos mexicano y colombiano, entre otros, y también tiene clientes norteamericanos.

La defensa, además, ha aportado al titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 pruebas de una decena de viajes a Estados Unidos en un periodo de tres años, y ha negado que fueran cada 15 días como sostiene la acusación.

En declaraciones a los medios de comunicación a la salida de la declaración, el propio Morales ha reconocido estar "muy contento" por haber podido dar su versión al magistrado para "aclarar y desmontar la teoría conspirativa" que, en su opinión, fomenta Assange, cuya versión, ha dicho, está "muy lejos de la realidad".

"PONER ZANCADILLAS" A SU EXTRADICIÓN

Para el dueño de UC Global, la intención del fundador de Wikileaks con todo este procedimiento en la Audiencia Nacional es "poner zancadillas" a su proceso de extradición a Estados Unidos, aunque también ha atribuido su imputación a una venganza personal por parte de alguno de sus exempleados que había sido despedido. Según ha afirmado, la información que han suministrado era "confidencial y privada" que además se ha "tergiversado" y ha llevado a "una serie de teorías que no hay por dónde cogerlas y son fácilmente desmontables".

Morales ha asegurado que es "totalmente falso" que vendiera información a Estados Unidos y ha lamentado que se encuentra en una situación "bastante injusta" porque en esta causa se siente "completamente indefenso" ante lo que considera un "juicio paralelo y mediático a favor" de Assange.

Tanto Morales --quien se encuentra en libertad provisional con medidas cautelares-- como UC Global están siendo investigados por delitos contra la intimidad y el secreto de las comunicaciones abogado-cliente, cohecho y blanqueo de capitales.