Primarias.- Tura reprocha al PSC de Barcelona su falta de neutralidad

Montserrat Tura
PSC

BARCELONA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -

La ex consellera Montserrat Tura ha reprochado este martes a la Federación del PSC de Barcelona que no sea neutral en la campaña de las primarias para escoger quien encabezará la candidatura socialista a las elecciones municipales de mayo --puesto que se disputa con el alcalde, Jordi Hereu--, aunque de entrada ya sabía que competiría en "una situación muy desigual".

Lo ha dicho en declaraciones a los medios antes de celebrar un acto con militantes y simpatizantes en la Agrupación de Sarrià-Sant Gervasi, en el que no ha permitido la entrada a periodistas, y ha estado acompañada entre otros por el gerente de Servicios Generales del consistorio y amigo personal de Hereu, Eduard Vicente, quien iba ataviado con un adhesivo con el perfil de Tura.

Tura se ha centrado en el primer secretario de la Federación de Barcelona y estrecho colaborador de Hereu, Carles Martí: "Cuando hace campaña claramente a favor de uno de los candidatos, no le puedo impedir que no haga lo que su conciencia le dicta, pero entonces lo de la neutralidad es un poco difícil de argumentar", postura que la Federación sí que ha defendido que mantiene.

Está contenta de la respuesta de las bases en su apoyo, algo que "tiene mucho más mérito que no llenar salas de actos con personas vinculadas a la estructura orgánica del partido", y ha enmarcado el anuncio de la compra del Teatro Arnau que Hereu lanzó este lunes antes de su acto de primarias dentro del rol de alcalde, aunque supone estar en desigualdad de condiciones.

A diferencia de Hereu, también ha resaltado que a ella le gusta pisar la calle, hablar con los militantes y actos sencillos, y que algunas personas la están ayudando "con pequeñas cantidades" económicas a financiar los gastos de los adhesivos y algún acto, que recoge publicitando el número de cuenta en su página web.

RECHAZA RETRASAR LA L9

En relación a la Línea 9 del Metro, ha rechazado que los trabajos se alarguen fuera del calendario que trazó el tripartito, que supone inaugurar tramos hasta 2014, ya que los vecinos hace años que soportan las obras y "si se alargan mucho más continuarán soportando durante muchos más años la situación", lo que podría obligar a indemnizar a las constructoras y tapar algunos pozos.

Por contra, Hereu afirmó este domingo en una entrevista de Europa Press que aceptaría un retraso de las obras de la L9 por ser corresponsable con los planes de austeridad de la Generalitat, aunque no pararlas ni que haya ajustes en políticas estructurales, como la atención social.