Afirma que PP no debe dejar que la "situación injusta" en Vitoria afecte a su "influencia en la política vasca"
BILBAO, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, ha reconocido que le habría gustado "mayor implicación" por parte del Gobierno de Mariano Rajoy para "cerrar la etapa de ETA", si bien ha admitido que la situación económica era "muy complicada". En este sentido, ha confiado en que ahora "se pueda retomar" porque todavía "no es tarde".
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Quiroga ha admitido que le habría gustado "una implicación mayor" por parte del Ejecutivo de Rajoy para "cerrar la etapa de ETA, en ese haber visualizado desde las instituciones de la mano del Gobierno vasco, del Partido Socialista y de todos aquellos que hubieran querido, esa victoria de la sociedad y de la democracia frente al terrorismo".
"Yo creo que habría abierto una etapa de verdad de tejer esa confianza que necesitamos entre vascos, que se ha perdido durante estos años fruto del terrorismo", ha manifestado la presidenta del PP vasco, que ha opinado, no obstante, que todavía "no es tarde" y ha deseado que "ojalá ahora se pueda retomar".
La dirigente del PP vasco ha reconocido, en cualquier caso, que la situación del Gobierno de España ha sido "muy complicada" y dejaba "poco margen a acciones políticas que requieren también de un tiempo y una dedicación que era difícil".
Según ha explicado, Mariano Rajoy le trasladó que también veía "esa necesidad", pero, en ese momento, el Ejecutivo estaba "prácticamente achicando agua en una nación que económicamente se iba al traste y que requería de todos nuestros esfuerzos".
Por otro lado, ha valorado "el reconocimiento" realizado por el lehendakari hacia las víctimas de ETA, si bien ha considerado que "se queda corto". Según ha indicado, es necesario dar "un paso más" porque se echan "en falta" medidas por parte del Gobierno vasco que "realmente demuestren que, detrás de ese arrepentimiento por no haber estado cerca de las víctimas y no haber sido claro en determinados momentos, se traduce en un posicionamiento claro de las instituciones vascas respecto a evitar que nadie en Euskadi sea capaz de reivindicar el pasado de ETA".
"Ése es un reto que tenemos en esta sociedad", ha insistido la presidenta del PP vasco, que ha lamentado que se oye "hablar mucho de los presos y de medidas de reinserción, pero, ¿y del otro lado, vamos a seguir avanzando entre todos en ese suelo ético que nos habíamos propuesto?, ¿en esas medidas que sellaran de una vez por todas la posibilidad de que nadie recurra nuevamente a la violencia y que haya un apoyo en la sociedad vasca?".
En la misma línea, se ha referido a las críticas a la política de dispersión por parte de algunas formaciones y ha insistido en que "está en manos de los presos de ETA". De esta manera, ha reiterado que "el día que cumplan con los requisitos establecidos, sobre todo desvincularse de la banda terrorista y hacer esa autocrítica de su pasado, estarán en las mismas condiciones que otros presos cumpliendo sus penas cerca de Euskadi".
VITORIA
Por otro lado, Quiroga ha reconocido que el PP no se ha recuperado "probablemente del todo" de la pérdida de la Alcaldía de Vitoria, pero ha subrayado que "la vida sigue" y es necesario "seguir ejerciendo nuestra responsabilidad allí donde un acuerdo de despachos nos ha colocado". "Porque no son los ciudadanos los que han querido que estemos en la oposición", ha subrayado.
En cualquier caso, ha afirmado que "éstas son las reglas de la democracia" y, por tanto, el PP seguirá "trabajando con la misma ilusión.
Asimismo, ha reiterado su "preocupación" por el hecho de que, "más allá de acuerdos entre partidos, uno no sabe muy bien en qué va a beneficiar a la ciudadanía, en qué va a mejorar Vitoria". "No terminamos de atisbar en qué se va a materializar ese acuerdo", ha señalado.
Pese a lo ocurrido, ha asegurado que el PP "siempre ha estado dispuesto a colaborar" y, aunque hayan "gustado más o menos determinados acuerdos o situaciones", nunca ha renunciado a "estar en toma de decisiones y a aportar soluciones, ideas que hagan avanzar a la sociedad". En este sentido, ha indicado que el PP va a "estar ahí, con una oposición constructiva y exigente".
A juicio de Arantza Quiroga, "debe haber" diálogo con el PNV y el PSE, a pesar de que "haya determinadas cosas que te gusten más o menos" porque en el PP "no nos podemos invalidar". "No podemos dejar que esa situación que nos ha dolido y que creemos injusta, afecte a nuestras relaciones y nuestra influencia dentro de la política vasca", ha manifestado.
Tras destacar que Javier Maroto ha recibido "un apoyo mayoritario" por parte de la ciudadanía, ha señalado, preguntada por la conveniencia de su estrategia electoral, que hay que "saber qué es lo que importa, que te han apoyado los ciudadanos u otras estrategias partidistas".
De este modo, ha planteado que "a nadie se le escapa que había un pacto previo" entre el PNV y el PSE, que "consiste en apuntalar la hegemonía" de la formación jeltzale. "Ha quedado claro que había un pacto y que se ha materializado con un poder, con un rodillo, en todas las instituciones y vamos a ver ahora las consecuencias que eso tiene en el día a día", ha añadido.
La presidenta del PP vasco ha considerado que la actitud de los socialistas ha sido "una irresponsabilidad". "Ser ese bastón necesario para que el PNV tenga el poder que tiene en estos momentos y que le puede llevar a tomar decisiones con las que, en principio, creíamos que los socialistas tampoco estaban de acuerdo nos parece que es un error", ha opinado.
LOS SUELDOS DE LOS ALCALDES
Por otro lado, ha advertido a quienes pretenden "abrir el melón" de la reforma de la Constitución y el "nuevo estatus" para Euskadi de que "podemos abrir otros melones" como el de "por qué tiene que tener Concierto" el País vasco.
De este modo, ha señalado que la ponencia de autogobierno del Parlamento vasco debería servir "para avanzar" en esta cuestión, "pero, sobre todo, en eficacia" de las competencias, y que en la crisis "no nos están sirviendo para tener una diferenciación" en políticas económicas.
Finalmente, se ha referido a la polémica suscitada en relación a los sueldos de los alcaldes y ha advertido de que, en un momento de contención e incluso reducción de salarios entre la ciudadanía, que un regidor "se lo suba" es "ir en contra del esfuerzo que se está pidiendo a la sociedad".
