MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha asegurado este miércoles que llamará a Pedro Sánchez después de Semana Santa, ya que, según ha subrayado, tras el 'no' que le ha expresado de forma reiterada el secretario general de los socialistas ha decidido dejar "enfriar" la situación.
En una entrevista en Telecinco, recogida por Europa Press, Rajoy ha recordado la negativa que ha expresado públicamente el líder del PSOE tanto a reunirse con él como a negociar algo con el PP para intentar formar gobierno. "He decidido enfriar las cosas después de esas declaraciones y después de Semana Santa veremos qué es lo que hay que hacer", ha manifestado.
A su entender, si dos personas quieren reunirse "se reúnen" y, a partir de ahí, se nombran equipos negociadores, pero si no hay esa voluntad "tiene bastante poco sentido". Por eso, ha dicho que será después de Semana Santa cuando se ponga en contacto con Pedro Sánchez al tiempo que ha apelado al "sentido común y la seriedad"
NO SE ARREPIENTE DE NO IR A LA INVESTIDURA
Una vez más, Rajoy ha asegurado que "en absoluto" se arrepiente de haber declinado el ofrecimiento del Rey para someterse al debate de investidura, ya que, según ha dicho, el objetivo de esa sesión parlamentaria es ser elegido presidente. "Y yo tenía la total y absoluta certeza de que era imposible que me eligieran presidente del Gobierno porque más de la mitad de la Cámara iba a votar que no", ha manifestado.
En este sentido, ha recalcado que él al rechazar ir a la investidura no "engañó" ni a la Cámara, ni a los votantes del PP ni a los españoles, y tampoco hizo "perder ni un minuto a nadie". Según ha agregado, Pedro Sánchez ha contado con un mes para llegar a acuerdo y, sin embargo, están "igual que el día 21 de diciembre".
Al ser preguntado si tras la investidura fallida de Sánchez está dispuesto a plantear al Rey la posibilidad de formar gobierno o habrá elecciones, Rajoy ha señalado que, aunque están viendo "todos los días cómo unos se reúnen con otros", lo "razonable" es que haya un gobierno de coalición entre PP, PSOE y Ciudadanos como ocurre en Alemania, en Austria y otros países europeos.
Tras asegurar que España tiene ahora el "reto capital" de consolidar la recuperación económica y seguir creando empleo, ha recalcado que no se pueden permitir "tener un gobierno que esté en minoría apoyado por parte de la derecha, por parte de la extrema izquierda o incluso por nacionalistas e independentistas". Por ello, ha abundado en que lo "sensato" es la gran coalición que plantea el PP que podría "hacer muchas cosas" en "beneficio del país".
LA SITUACIÓN EN PODEMOS
Al ser preguntado por la situación interna en el partido de Pablo Iglesias, --tras la dimisión del responsable de Organización del partido en Madrid--, Rajoy ha dicho que no le gustaba opinar sobre los "problemas partidarios" que pueden tener otras formaciones. Eso sí, ha resaltado que dirigir una organización política "no es fácil" y requiere "mucho diálogo, hablar mucho y comprender".
"Me pregunta si la señora presidenta de la Junta de Andalucía no tiene buenas relaciones con el señor Sánchez o el señor Errejón con el señor Iglesias. Yo no voy a entrar en eso porque no lo conozco y ni siquiera conozco a las personas y al secretario de Organización (de Podemos) que ha sido cesado", ha manifestado.
Rajoy ha recordado su experiencia porque ha sido vicesecretario de Organización del PP y presidente provincial y "no es fácil". "Pero no quiero entrar porque no tengo datos y no se trata de hablar de lo que uno no sabe y los problemas que tengan los demás. A mí ya me llega con ocuparme de mi responsabilidad como presidente del Gobierno, aunque sea en funciones, y de mi propio partido", ha resaltado.
PERSONA 'NON GRATA' EN PONTEVEDRA
El jefe del Ejecutivo en funciones también se ha referido al puñetazo que sufrió en su tierra, Pontevedra, durante la campaña electoral, así como al hecho de que el Ayuntamiento de esa ciudad le declarara persona 'non grata'. Según ha dicho, el pasado fin de semana visitó Pontevedra por un acto del PP y le "reconforta" la "solidaridad y el cariño" que ha recibido de la gente, incluso de muchas personas que no son del PP y no le han votado nunca.
"Eso me reconforta y me recompensa de todo. Y se lo digo con el corazón", ha manifestado, para añadir que ninguno de esos dos acontecimientos que ha vivido en Pontevedra fue "grato", si bien ha reiterado que se siente "sobradamente compensado por el cariño de mucha gente".