Silva Sande acusa al 'camarada Arenas' de ordenar los atentados de los GRAPO y éste le llama "tipejo" y "basura"

El miembro de los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO) Fernando Silva Sande ha asegurado en la Audiencia Nacional que el secretario general del PCE (r), Manuel Pérez Martínez, conocido como el 'camarada Arenas', ordenaba todos los atentados de la banda, aunque éste ha negado esta acusación y, además, le ha llamado "tipejo", "fulano", "infame", "violador" y "basura".

Los dos se enfrentan, junto a la también terrorista Victoria Gómez, a una petición de 55 años de cárcel solicitada por el fiscal Vicente González Mota, que ha elevado a definitiva su acusación por un delito de estragos terroristas y dos de asesinato en grado de tentativa por ordenar la colocación de un artefacto que explotó el 1 de junio de 1998 en la empresa de trabajo temporal Attempora, situada en la calle Alberto Alcocer de Madrid.

Durante el juicio, que ha quedado visto para sentencia, Silva Sande ha vuelto a exhibir sus rencillas con el 'camarada Arenas' y ha asegurado que la Comisión Política del Comando Central, qué este formaba junto a un responsable de Propaganda y otro de Organización, "transmitía a los comandos" todas las acciones armadas que debían llevar a cabo. "El Comando Central no decide nada, lo decide la Comisión Política", ha asegurado ante el tribunal.

No obstante, ha admitido que las órdenes a los 'comandos' eran "transmitidas" por los miembros del Comando Central, que formaban junto a él otros miembros de los GRAPO como Victoria Gómez, José Antonio Ramón Teijelo y José Luis Elipe López.

LE ACUSAN DE "CHIVATO"

El 'camarada Arenas', por su parte, ha mantenido que, a pesar de la sentencia del Tribunal Supremo que consideró al PCE (r) como brazo político de los GRAPO, el partido "no tenía nada que ver con la utilización de la lucha armada". "No existe ninguna prueba que demuestre que eso ha sido así nunca", ha señalado Pérez Martínez antes de calificar a Silva Sande de "tipejo". "Ese fulano nunca formó parte de la dirección ni del Comité Central", ha añadido.

De igual modo, ha sostenido que, aunque el PCE (r) prestaba "mucha atención" a la "violencia" ejercida por "las empresas esclavistas de trabajo temporal", nunca tomó parte en "ninguna acción armada". "¡El partido no da las órdenes de cometer atentados, nunca jamás!", ha afirmado visiblemente enfadado. En su turno de última palabra, que ha finalizado cantando la Internacional con el puño en alto, ha acusado a Silva Sande de perjudicar con su actitud "a personas honestas y honradas".

Por su parte, Victoria Gómez ha señalado que eran los propios 'comandos' los que elegían sus propios objetivos cuando se trataba de "operativos muy fáciles de realizar", como el caso de las empresas de trabajo temporal. En todo caso, no ha querido revelar quién cometió el atentado contra Attempora.

"Yo no soy una chivata como ese señor --ha dicho señalando a Silva Sande--. La historia que se ha montado no es cierta". De igual forma, ha asegurado que a Silva Sande "le gustaba mucho irse de discotecas, de copas y con las jovencitas de la organización hasta altas horas de la noche".

En el atentado contra la empresa de trabajo temporal, la onda explosiva alcanzó a dos policías que resultaron heridos leves. Los GRAPO realizaron una llamada de aviso en la que dijeron que la bomba haría explosión en un lapso de 10 minutos, aunque, según el fiscal, este tiempo resultó "insuficiente para poder desalojar el edificio".