Asegura que el proceso "no servirá para desestabilizar" y prevé el éxito cuando el PP esté "en condiciones de trabajar de verdad"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, reivindicó hoy el cumplimiento del compromiso que asumió de que la reforma del Estatuto "no perturbaría el avance" de Galicia y se mostró convencido de que la comunidad "conseguirá" mejorar su autogobierno, "pero no a condición de quedar varada a costa" del proceso.
En un desayuno informativo en su residencia oficial de Monte Pío antes del parón estival, Touriño declaró que aunque "uno de los grandes retos" contraídos por el bipartito y "por el presidente desde luego" era la revisión del texto de 1981, "en esta misma sala se constató un veto derivado del posicionamiento político del PP", en alusión a la reunión del 17 de enero en la que los tres líderes constataron la imposibilidad de acuerdo.
No obstante, celebró que el fracaso de la negociación "no limitase el avance del país" y advirtió de que "nadie va a conducir este barco hacia ninguna parte". "Sé que Galicia quiere reforma, pero eso no va a servir para desestabilizar el país", mantuvo, tras lo que valoró que tampoco el bipartito se viera afectado: "Que nadie busque agua donde no la hay".
Así, abogó por "cambiar las pilas" para eliminar "diques" puesto que, en su opinión, "el día que el PP esté en condiciones de trabajar de verdad, habrá reforma". "No me pidan agendas, las marcaré en función de circunstancias que son perfectamente medibles", aseveró, en el sentido de que "el Gobierno sabrá cuándo".
"MAREAR LA PERDIZ"
En este sentido, declaró que, "tal como están las cosas en el PP, ahora no" y, frente al "mérito negativo" de la oposición, celebró que "nadie pueda decir que Galicia pasó dos años mareando la perdiz". "Conseguiremos la reforma, pero no a condición de tener a Galicia varada a costa del Estatuto", reiteró.
De igual modo, preguntado por las reivindicaciones de su vicepresidente, el nacionalista Anxo Quintana, en la manifestación con motivo del 25 de julio, Touriño rechazó entrar en el "terreno de la competición". "Las medallas ya las entregamos el otro día a un ilustre galleguista", zanjó.
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