El alto tribunal otorga mayor relevancia a las declaraciones prestadas en fase de instrucción frente a las del juicio
MADRID, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Supremo ha inadmitido el recurso presentado por el ex dirigente de los GRAPO Fernando Silva Sande en contra de la sentencia dictada el pasado 23 de junio por la Audiencia Nacional, que le condenó a 11 años y medio de cárcel por su participación en un atentado triple contra los edificios del Tribunal Constitucional, la Bolsa de Madrid y el Ministerio de Economía y Hacienda, perpetrado el 6 de septiembre de 1990.
Silva Sande alegó en su recurso que la única prueba empleada por la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional para condenarle fueron las declaraciones incriminatorias prestadas por su ex compañero de comando Guillermo Vázquez Bautista ante la policía y ante el juez tras su detención pese a que luego se retractó de ellas durante la celebración del juicio.
Efectivamente, la sentencia de la Audiencia Nacional otorgaba especial validez a las declaraciones de Vázquez Bautista en fase de instrucción, cuando reconoció haber colocado uno de los tres artefactos en el Ministerio de Economía y que Silva Sande, él y la también terrorista María Jesús Romero Vega formaban entonces un comando de los GRAPO.
Pese a ello, durante el juicio, Vázquez Bautista, no supo decir si Silva Sande ocupaba un puesto de responsabilidad en la banda y aseguró no recordar si el recurrente participó en el triple atentado. "Yo preparé la bomba que yo puse, no recuerdo cómo se fabricaron las otras, yo recuerdo lo mío no lo de los demás", explicó.
No obstante, el Tribunal Supremo, en un auto del que ha sido ponente el magistrado Adolfo Prego, rechaza el recurso de Silva Sande defendiendo que "en el caso de testimonios contradictorios de un mismo declarante, es lícito que el Tribunal, ponderando la mayor o menor verosimilitud de las versiones contrapuestas por contraste con los datos deducidos de otras pruebas practicadas y con la credibilidad que hayan de merecer las razones expuestas para justificar las contradicciones, otorgue preponderancia a las prestadas en instrucción".
De hecho, en este caso concreto, el Tribunal Supremo avala que la Audiencia Nacional se decantase "razonablemente por conceder mayor credibilidad a las primeras manifestaciones del coimputado" y añade que "la versión incriminatoria vertida por Guillermo Vázquez en sede policial e instructora cuenta con una serie de datos objetivos no cuestionados, que la corroboran plenamente".
TRIPLE ATENTADO
En 1990 Silva Sande se desplazó a Madrid junto a Vázquez Bautista y Romero Vega con el objetivo de realizar varios atentados contra instituciones representativas del Estado. Por ello. Finalmente, el 6 de septiembre de 1990, sobre las 12.00 horas, Silva Sande acudió a la Sede de la Bolsa de Valores de Madrid, donde dejó una bolsa con explosivos en los lavabos. Sus compañeros, Vázquez Bautista y Romero Vega --ya condenados por estos hechos--, hicieron lo propio en los edificios del Tribunal Constitucional y el Ministerio de Economía y Hacienda.
Las tres bombas explosionaron entre las 11.45 y las 12.00 horas de aquel día causando heridas de diversa consideración a siete personas y daños materiales que fueron cifrados en un total de 1.304.084 euros que Silva Sande deberá indemnizar de manera solidaria junto a sus dos compañeros.
