"Ahondar en la desafección hacia la España plural desde Cataluña es un error gravísimo en términos históricos"
BARCELONA, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha afirmado que "para volver a crecer con un crecimiento más sano y un nuevo modelo económico, España necesita a Cataluña y Cataluña necesita a España".
En su discurso en el foro Tribuna Barcelona, ha aseverado que esta necesidad se da "hoy más que nunca", y que "solo hay un modo de conseguir esta convivencia: en el seno de un proyecto común, fundamentado en el respeto y en el reconocimiento de quienes lo integran; sólo así".
Zapatero ha destacado que el proceso de reformas en marcha en España está llamado a producir "un fuerte efecto movilizador de la actividad económica en todo el país, pero de manera singular en Cataluña, por su peso industrial, por su capacidad exportadora, por la composición de su tejido productivo y por su apuesta temprana y sostenida por la innovación".
Ha añadido que se trata de reformas que "apuntan al corazón mismo de la economía catalana, a sus señas de identidad, a la liberación de sus energías y de sus grandes potenciales para salir de esta crisis".
Como ejemplos, ha citado la reforma del sistema financiero, que está "muy avanzada" y que en Cataluña se ha traducido en la conformación de tres grandes grupos de cajas "que podrán seguir respaldando en mejores condiciones aún que en el pasado el desarrollo económico de esta zona".
En el caso de la reforma laboral, ha señalado que dado que la presencia relativa de pymes en Cataluña es mayor que en el resto de España, tanto en términos de facturación como de empleo, "es previsible esperar que los efectos de la reforma laboral sean todavía más positivos" en el caso de la economía catalana.
También ha recalcado el peso industrial y exportador de Cataluña, y ha añadido que el crecimiento de las exportaciones en España permitirá fortalecer el ahorro interno y limitar el endeudamiento que "ha caracterizado durante demasiados años una buena parte del desarrollo económico de España".
El presidente del Gobierno ha insistido en que este "horizonte marcado por el proceso de reformas" servirá "para impulsar la recuperación económica, para impulsar el cambio de modelo productivo, para lograr una economía más competitiva y sostenible, para volver a crear empleo, que es nuestro principal desafío, y para preservar y reforzar el Estado del Bienestar".
"Son reformas que no son fáciles de acometer, que comportan esfuerzos y exigencias, pero que a medio y largo plazo producirán tanto provecho como ambición seamos capaces de poner ahora en ellas", ha defendido ante un auditorio de unos 500 representantes de la sociedad catalana.
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Tras una pregunta del periodista Luís del Olmo --paisano de Zapatero--, que le reconoció el "coraje" que había tenido en venir a Cataluña tras la situación creada, Zapatero ha aprovechado para destacar que siempre que viene está "muy a gusto" y "contento".
"Que haya un clima difícil por la sentencia del TC me obliga aún más. Y a lo mejor vengo más, porque tengo la convicción de que cualquier riesgo de ahondar en la desafección hacia la España plural desde Cataluña es un error gravísimo en términos históricos", ha asegurado.
En este sentido, ha afirmado que se dejará "la piel" para evitar que suceda esto, y ha llamado al esfuerzo y a la confianza para dejar atrás este "mal momento" con respeto y reconocimiento a la historia, identidad, capacidad económica y a la fuerza de los catalanes en un proyecto común con el conjunto de los españoles.
"Cataluña ha sabido estar y sabrá estar. Y España y el Gobierno va a saber estar con Cataluña y trabajar para recuperar esa confianza. En los momentos difíciles es cuando surgen grandes oportunidades", ha añadido Zapatero, quien ha insistido en que la España fuerte es la España plural.
Ha defendido así que el mejor proyecto es el común desde el respeto a las distintas sensibilidades, y que en este camino para consolidar un modelo con "rasgos federales" también deben contribuir las fuerzas de centro-derecha.
"Hacer cosas juntos es más útil para todos. Cualquier tentación diferente es un camino incierto y sin sentido a la luz de nuestra historia y de lo que piensan la inmensa mayoría de los ciudadanos", ha zanjado.
