El arzobispo Roselló destaca la vida de "servicio generoso" del Papa Francisco y pide "continuar su legado"

PAMPLONA 6 May. (EUROPA PRESS) -

El arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, Florencio Roselló, ha ensalzado este martes la figura del Papa Francisco, de quien ha destacado que "su vida ha sido un servicio generoso y amoroso" y ha afirmado que "su amor por los marginados, inmigrantes, presos, enfermos, mujeres víctima de trata, fue un sello distintivo de su pontificado"

Roselló ha señalado, en el funeral por el Papa en la Catedral de Pamplona, que la vida de Francisco "nos compromete a continuar su legado y a pedir al Espíritu Santo, en el cónclave que comienza mañana, que nos conceda un padre y pastor que la Iglesia necesita en este momento y pueda continuar el camino iniciado por el Papa Francisco".

El arzobispo de Pamplona ha afirmado que la muerte de Francisco "nos ha dejado huérfanos, un sentimiento de soledad se ha instalado en mucha gente". "Nuestro padre, nuestro hermano mayor, se ha ido. Ese carácter cercano, campechano y humano lo hacía como de casa. Los que hemos podido compartir algunas conversaciones con él sentimos que nos falta algo. Pero nuestra fe nos asegura que su legado continúa. Desde el primer instante de su pontificado, con aquella simple inclinación y su 'buona sera', en el balcón de San Pedro, con esa sencillez en la vestimenta simplificada, alejado de apariencias, nos mostró que el amor a Cristo no es una idea abstracta, es una forma concreta de vivir en humildad y en misericordia", ha destacado.

Florencio Roselló ha asegurado que el Papa Francisco "nos enseñó que, al cuidar de los más vulnerables, estamos cuidando a Cristo sufriendo en ellos". "Hoy estos vulnerables le reciben en el cielo, le aplauden, le abrazan y le guardan un lugar especial en la gloria. Porque especial ha sido Francisco para ellos", ha resaltado.

El arzobispo ha destacado que "Francisco ha ejercicio de altavoz de los derechos humanos de los inmigrantes, defendiendo el derecho a emigrar por un futuro mejor, y censurando a países que están limitando la ayuda humanitaria a los inmigrantes". "Como dijo recientemente, es preciso 'derribar muros y tender puentes'. Hoy nos toca a nosotros derribar muros y construir puentes", ha añadido.

Además, Roselló ha valorado que, durante su pontificado, el Papa ha visitado 23 prisiones de todo el mundo. "En todas ha levantado la voz para animar a los presos, para denunciar las injusticias y crear esperanza. Su palabra era la primera y más autorizada en defensa de los derechos humanos de los presos. Se manifestó en contra de la cadena perpetua cuando decía que 'una condena sin futuro es una tortura'. Apoyó la abolición de la pena de muerte cuando decía que 'la pena de muerte es un recurso que para la fe cristiana es inadmisible'. A los que quedamos nos toca seguir trabajando por humanizar las prisiones. Trabajar por ser una Iglesia de puertas abiertas donde los presos puedan entrar; trabajar en prevención y reinserción con centros de acogida para permisos y libertades", ha defendido.

Por otro lado, ha subrayado que Francisco se convirtió en "un mensajero y constructor de la paz" a través de su encíclica 'Fratelli Tutti', y ha afirmado que "su contribución a la paz no termina ni después de fallecido, cuando propició, en su funeral, el encuentro entre Trump y Zelenski en el Vaticano; hablaron de paz". "Francisco, hombre de paz", ha destacado.

También ha afirmado Florencio Roselló que el Papa Francisco "supo escuchar el clamor de los pobres, la voz de la creación herida, a través de su encíclica 'Laudato Si' (2015), en la que denunció la deuda que tenemos con la creación, con la casa común, y que afecta especialmente a los pobres".

Otro de los aspectos que ha destacado el arzobispo de Pamplona es que el Papa "supo abrazar y besar unas llagas de dolor muy duras, las llagas de las víctimas de abusos de la Iglesia". "Francisco, recibió, escuchó y pidió perdón a víctimas de abusos. Animó a obispos y superiores mayores de religiosos a afrontar esta lacra. Puso en el centro a las víctimas y afrontó su reparación y su necesidad de justicia. Nunca evadió el tema de los abusos de la Iglesia", ha señalado.

Florencio Roselló ha destacado que "Francisco fue un hombre tocado por la ternura de Dios, fue un pastor que olía a oveja, como él mismo dijo que deben ser los pastores". "Nos recordó que la Iglesia no es una fortaleza cerrada, sino un hospital de campaña. La Iglesia está llena de heridos que necesitan curación. El papa Francisco siempre ha apostado por una iglesia en salida", ha afirmado.

Aprovechando la presencia de representantes políticos en el funeral en la Catedral de Pamplona, el arzobispo ha rescatado unas palabras del Papa Francisco en las que invitaba a rezar por los líderes políticos para que "trabajen por el bien común", y aseguraba que, si bien la "política no tiene buena fama, es mucho más noble de lo que aparenta".

Florenció Roselló ha afirmado que "Francisco ha terminado su camino". "Su vida fue una entrega constante, hasta el final, incluso en la fragilidad de los últimos días cuando se paseó por la plaza San Pedro, ya muy débil de salud. La vida del papa Francisco nos compromete a continuar su legado, y a pedir al Espíritu Santo, en el cónclave que comienza mañana, que nos conceda un padre y pastor que la Iglesia necesita en este momento y pueda continuar el camino iniciado por el Papa Francisco", ha señalado.