PAMPLONA, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona ha puesto en marcha una campaña para destinar a un fin solidario el saldo remanente de las antiguas tarjetas monedero del transporte urbano comarcal, que dejarán de ser válidas el 31 de diciembre y que no se pueden recargar desde el pasado 19 de noviembre.
Esta campaña se integra dentro de un sistema habilitado por la Mancomunidad para devolver a los ciudadanos que así lo deseen el saldo que quede en dichas tarjetas. Desde el 11 de enero hasta el 26 de febrero los interesados en recuperar el importe residual de las tarjetas podrá solicitarlo en las oficinas de la entidad mancomunidad en horario de 10 a 18 horas.
Según informó el presidente de la Mancomunidad, Javier Torrens, en rueda de prensa, los saldos de dichas tarjetas inferiores a tres euros se devolverán en metálico, mientras que los superiores se abonarán mediante transferencia a cuenta.
No obstante, quien así lo quiera podrá destinar dicho saldo a un uso solidario. El dinero recaudado se destinará únicamente a viajes para el transporte urbano. De esta forma, a partir de mañana, sábado, se instalarán en los 142 autobuses urbanos cajas-hucha donde los ciudadanos podrán introducir las tarjetas antiguas. La iniciativa se mantendrá hasta finales de febrero.
Torrens señaló que "hay viajeros con las antiguas tarjetas, que ya no pueden recargarlas, con saldos inferiores a un viaje". "Habrá muchos ciudadanos que pueden renunciar a los pocos céntimos que queden en la tarjeta y de ahí la campaña para recuperar esos pequeños saldos que de otra manera se podrían perder", expuso.
La iniciativa promovida por la Mancomunidad, a propuesta del Comedor social París 365, tratará de ayudar al transporte de personas en exclusión social que, entre otras, hacen uso de ese comedor, "donde la comida cuesta 50 céntimos y para los que el transporte cuesta ya más dinero".
Actualmente, hay 131.150 tarjetas de pago sin contacto, a las que se suman las 39.130 tarjetas de perfiles sociales. Según Torrens, hay 5.651 tarjetas ciudadanas que se utilizan para el pago del transporte, "lo que supone una cierta decepción en el uso de esas tarjetas".
CARRIL BUS
En otro orden de cosas, Javier Torrens, manifestó, en repuesta a preguntas de los periodistas, que es "necesaria" la ampliación de siete tramos de carril bus en Pamplona. "Se trata de una exigencia de mínimos", dijo, para añadir que es preciso "favorecer" en la capital navarra el uso del transporte público.
Consideró "frustrante" que en el trabajo conjunto con el Ayuntamiento de Pamplona no se haya conseguido sacar adelante los siete tramos de carril bus. No obstante, señaló que continuarán trabajando en esa línea "porque el transporte público solo se puede priorizar a costa del transporte privado".
"La ciudad tiene una capacidad y hay que repartirla con criterios de sostenibilidad", dijo Torrens, quien defendió que "un autobús con 50 pasajeros ocupa mucho menos espacio que 50 conductores en su vehículo privado".
Rechazó el presidente de la Mancomunidad que en Pamplona la velocidad comercial del transporte público es superior a la de Madrid. "En un años ha bajado esa velocidad de 14,5 kilómetros por hora a 12,7", expuso, y señaló que "existen más dificultades para acceder a las paradas y no hay prioridad semafórica".
