El fiscal destaca que en 2006 no hubo homicidios y se propone trabajar por la seguridad en encierro y en locales de ocio
PAMPLONA, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), Juan Manuel Fernández, afirmó hoy en la apertura del año judicial que "el gran problema" de la Administración de Justicia en Navarra es "la escasez de órganos judiciales" y demandó la creación de un cuarto Juzgado de lo Social y de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial.
Además, como ya hiciera en años anteriores con motivo de la apertura solemne del curso judicial, Juan Manuel Fernández se refirió al Palacio de Justicia de Pamplona para manifestar que "su capacidad para albergar nuevos órganos ha tocado techo" y explicó que "con dificultades conseguiremos que pueda albergar el nuevo Juzgado de lo Penal - ya creado-, y ya no habrá sitio para más".
El presidente del TSJN aludió en su intervención ante las primeras autoridades de Navarra a un informe del Consejo General del Poder Judicial que sitúa a la Comunidad foral en el decimotercer lugar en cuanto al número de jueces por cada 100.000 habitantes (9,47), muy lejos, por ejemplo, de Cantabria (12,15), una comunidad con un número de habitantes similar al de Navarra".
Además, la Comunidad foral cuenta con la segunda menor plantilla de fiscales (15) de todas las comunidades autónomas, sólo por delante de La Rioja (11), y muy lejos de la antepenúltima, Cantabria, que tiene 24 fiscales.
Ante esta situación, Juan Manuel Fernández explicó que "uno de los problemas, quizás el gran problema, el más acuciante y el que más ha lastrado el correcto funcionamiento de la Administración de Justicia en Navarra, ha sido el de las escasez de órganos judiciales, las deficiencias en la planta judicial".
No obstante, el presidente del TSJN reconoció que la situación ha mejorado en los últimos tres años tras la creación de nueve nuevos órganos, el último, el Juzgado de lo Penal número 4, que entrará en funcionamiento a finales del presente año.
Juan Manuel Fernández pronunció estas palabras en su discurso de apertura del año judicial, un acto al que asistieron, entre otras personalidades, el presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz; la presidenta del Parlamento, Elena Torres; el delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa; los rectores de la Universidad Pública de Navarra (Julio Lafuente) y de la Universidad de Navarra (Ángel Gómez Montoro); y los primeros mandos de la Policía Foral, la Policía Nacional y la Guardia Civil.
El presidente del TSJN sostuvo que el nuevo año judicial comienza "con el objetivo de seguir contribuyendo al bienestar y desarrollo de la sociedad navarra" y recalcó, pese a la escasez de órganos judiciales, que Navarra presenta la menor tasa de asuntos pendientes de toda España y es la segunda mejor comunidad en la resolución de casos.
Fernández indicó que "esta posición de privilegio de la Justicia navarra es fruto del apoyo institucional al que antes me he referido, así como de las importantes inversiones que se han hecho en los últimos años para modernizar una Administración de Justicia afectada, endémicamente, por su anquilosamiento y carencias, personales y materiales".
SIN HOMICIDIOS EN 2006
Por otra parte, el fiscal jefe del TSJN, Javier Muñoz, se refirió en el mismo acto a la Memoria de la Fiscalía de Navarra en el año 2006, de la que destacó que no se registró ni un solo homicidio ni asesinato, algo que calificó de "absolutamente excepcional" y que demuestra el "grado de madurez" de la sociedad navarra.
No obstante, reconoció que en lo que va de 2007 se han cometido ya tres homicidios (en Tudela, Estella y Villafranca), los tres con presunto autor conocido: uno se suicidó y los otros dos están ya a disposición de la justicia.
Por otra parte, Javier Muñoz advirtió sobre la necesidad de trabajar para erradicar las agresiones y los actos de alteración del orden público que se producen de madrugada y en lugares donde se expenden bebidas alcohólicas.
Muñoz explicó que se ha observado en determinados lugares de diversión, en horas nocturnas frecuentadas generalmente por jóvenes incidentes "por las cuestiones más banales imaginables, pero que han desencadenado acciones violentas entre grupos de asistentes a esos locales".
Ante esta situación, el fiscal reclamó a las fuerzas policiales el "escrupuloso cumplimento de las medidas administrativas municipales respecto a las horas de cierre, la no entrada de menores, control de aforo del local, vigilancia policial externa, que será fundamentalmente llevada a cabo por la Policía Municipal o Nacional para impedir altercados en el exterior del local". También citó la acción de la fiscalía para atajar estos casos.
Además, demandó que el personal de la seguridad privada de estos locales esté formado y advirtió de casos en los que los vigilantes actúan de manera "desproporcionada" e incluso en ocasiones "cometen agresiones a los clientes de forma injustificada".
También llamó la atención sobre la participación de menores en festejos taurinos, para advertir de que aquellos padres que introduzcan a sus hijos en los encierros podrían cometer un delito de lesiones u homicidio por imprudencia, por lo que recalcó que ellos son "los primeros obligados" en evitar estas situaciones.
Por otra parte, apuntó que los organizadores del encierro o del evento taurino deben procurar que no se introduzcan menores en su recorrido, tomando las medidas de vigilancia al respecto, ya que, de ocurrir una lesión para menores, "en función de las circunstancias, la responsabilidad penal puede alcanzar al organizador".
Finalmente, pidió a las fuerzas policiales que extremen su actividad para impedir que los menores entren en la zona del recorrido del encierro.
