Antonio Casado.- El "puente" contra el laicismo

MADRID 7 Dic. (OTR/PRESS) -

También los sumos pontífices, sobre todo los de estirpe intelectual, como es el caso de Ratzinger, pueden manejar el sofisma. Este lo ha hecho con mucha gracia cuando, en vísperas de nuestro debate doméstico sobre el manifiesto laicista del PSOE, Benedicto XVI dijo algo así como que el laicismo no nos hace libres respecto a la religión sino respecto a la práctica de la misma.

El sofisma me ha recordado otro, mucho más popular, que coloca a Casillas como responsable único de los goles que recibe el Real Madrid pues, según semejante trampa de la lógica, no es al Madrid al que le meten los goles sino a su guardameta. Toma ya. Así que, ya saben ustedes, según el Papa, el laicismo no nos exime de la religión sino de su práctica.

Es lo que tiene ponerse a discurrir bajo los efectos del uso y disfrute de este largo puente de la Inmaculada y la Constitución. En nombre de estas dos entidades, de tan distinta naturaleza, millones de españoles han echado el cierre hasta el lunes. No sé si me explico pero es este maridaje de la Virgen María y nuestra Carta Magna lo que alimenta la sospecha de que algún listillo debió pensar en su día en las ventajas de juntar las cosas de Dios con las de los ciudadanos. Este feliz maridaje, debidamente enganchado en el calendario, viene a ser como un sutil blindaje contra el laicismo. Así que en honor de la Virgen María y nuestra Carta Magna, a la mayor gloria de ambos sin distingos ni prelación, millones de españoles se levantaron este miércoles de mejor humor porque el despertador no sonó en la mesilla. Mal tiempo, eso sí. Pero es preferible enfrentarse a la niebla, la lluvia o la nieve, o las tres cosas a la vez, pues todo puede ocurrir en una evasión ocasional por carretera, que a la guerra de las banderas del "conseller" Puigcercós, el autismo de Zapatero o los insufribles festejos institucionales de tal día como hoy, o las tres cosas a la vez, pues todo puede pasar al tiempo en la currada vida del periodista de guardia en medio del "puente".

En cuanto a quienes no ejercen de figurantes de esta democracia palabrera retratada a diario en los medios de comunicación -políticos y periodistas mayormente-, ni falta que les hace, pues echan el cierre y se van de vacaciones hasta el lunes. Para darse una alegría. O para engrosar las cifras de candidatos a donantes de órganos, si deciden echarse a la carretera.

Antonio Casado.