MADRID 16 Feb. (OTR/PRESS) -
La ministra Narbona tiene a Ferraz de los nervios, a Moncloa hasta las narices y a Maria Teresa Fernández de la Vega hasta los pelos. Su ejecutoria de legislatura se limita a haber echado la culpa a todos los demás de cualquiera de las catástrofes que le han afectado (hasta el incendio de Guadalajara se lo cargó a Barreda), a cargarse el PHN y la idea del agua como bien común pero a cambio de las famosas desaladoras no ha puesto en marcha sino 2 de 25 y convertidas en maquinas de contaminar , a rendir las aguas españolas de la bahía de Algeciras y entregarlas a los ingleses (hasta Moratinos ha tenido que reprenderla) y como postre y remate a lograr unir al mundo agrario y el mundo cinegético en una manifestación que se promete masiva contra sus abusos, sus desprecios y sus agresiones y las de sus corte ecologista y sus leyes que atacan directamente al medio agrario, a la sostenibilidad rural y que, so pretexto de proteger, lo que hace es dañar a la verdadera conservación con su idea de que el campo es una posta, una jaula de la que solo ella y unos privilegiados santones (sus maravillosamente subvencionados y pagados gurus ecologistas urbanos) tienen la llave y donde la única aspiración de las gentes que viven sobre el terreno en convertirse en sus camareros.
La manifestación "Por el campo, por la caza y por la conservación" ha encendido todas las luces de alarma. Y un gobierno que no anda sobrado de votos se pregunta perplejo que a que viene ese monumental cabreo . Porque lo hay. La ministra lo primero que ha respondido es que era "político" e intenta conseguir que alguien la prohíba. Pero la Junta Electoral la desautoriza aceptando la marcha"al deducirse que el objeto no es la captación del voto"con lo cual su argumento y el de sus corifeos queda arrumbado. Se ha expresado por los colectivos convocantes que no hay rasgos políticos en la convocatoria, que lo único que exigen de una vez, es respeto, un respeto para ese enorme colectivo al que se arremete cada día, al que se sataniza , al que no se considera y al que se desprecia. "Sea cual sea y del color que sea quien ocupe ese despacho de Medio Ambiente, en el próximo gobierno, que no sea ella por favor, lo único que aquí se pide es un respeto". señalan en la Federación española de Caza que junto con el sindicato agrario Asaja encabezan la convocatoria . Tras fracasar en esos intentos, Carbona lanzó primero a su corte ecologista, los que más manifestaciones celebran (eso si de a cuatro gatos)a que se "opusieran" -¿no es un derecho constitucional?-a la celebración de esta. Luego a los medios que paga los puso en línea de ataque contra los malvados cazadores y , fracasado todo y con la movilización creciente, intentó la presión sobre los presidentes federativos autonómicos, especialmente los que tienen gobiernos socialistas. Le contestaron que a la reunión venían con su presidente nacional y le volvieron a decir los mismo. Que sus leyes son un disparate y su actitud una agresión sistemática. Un solo presidente, el aragonés, vulnerando la votación unánime del resto se ha descolgado de la convocatoria, pero los cazadores de Aragón estarán, desde luego, presentes.
La Narbona sabe que el 1 de marzo, en la Castellana habrá un gentío. Y está en un ataque. Pero empecinada en sus desvaríos sigue lanzando los que puede contra quienes considera sus enemigos .El último era tan descabellado que han tenido que frenárselo. Pretendía, con su supino desconocimiento del campo y de la caza, y para regular "el movimiento de animales de explotaciones cinegéticas o de pesca fluvial y de fauna silvestre de espacios naturales acotados" que todos los ejemplares fueran analizados uno a uno y puestos en cuarentena. O sea, se acabaron las repoblaciones de perdices, de conejos , de truchas. La locura era de tal calibre, además de imposible, en especies salvajes morirían de estrés o se matarían entre ellos , que el Decreto que quería aprobar ya se lo han paralizado. Pero ella seguirá empeñada en su agresión y en su ignorancia. Si le dejan. Y está claro que ese enorme colectivo, ese gigante dormido al que ha despertado le va a decir basta. Entre ellos habrá no pocos socialistas. Que están, como labradores o como cazadores, absolutamente hartos de la Narbona.
Antonio Pérez Henares.