Actualizado 13/04/2008 02:00

Charo Zarzalejos.- El Gobierno de la primera vez

MADRID 13 Abr. (OTR/PRESS) -

Es la primera vez que hay más hombres que mujeres. Es la primera vez que de Defensa se encarga a una mujer y es la primera vez que se crea un ministerio de Igualdad; es decir un ministerio muy transversal que tendrá que vigilar desde la eficiencia en la protección a las mujeres maltratadas hasta garantizar su incorporación efectiva a los órganos de decisión de empresas y grandes estamentos. Su titular significa también 'la primera vez' puesto que nunca antes se había sentado en el Consejo de Ministros un titular de tan solo 31 años. El Presidente se muestra satisfecho de tanta 'primera vez'. Aporta ese punto rompedor que siempre le ha gustado.

Es en esta clave, en la de 'rompedor', en una de las que puede explicar la que sin duda ha sido la apuesta más significativa, de mayor calado político, del Presidente, como es que la catalana Carmen Chacón sea la titular del ministerio de Defensa y, para que no falte novedad, será también la primera vez que una miembro del Gobierno dará a luz en pleno mandato. En este punto hay que señalar no obstante que para actitud rompedora y novedosa la que en su momento tuvo José María Aznar al nombrar a Ana Palacio ministra de Asuntos Exteriores. "¿Eres consciente que pertenezco al sector de población de máximo riesgo?". "Tu podrás", le respondió el entonces Presidente. El riesgo no era el nacimiento de un bebé, sino la lucha a brazo partido con la vida. Por aquel entonces Ana Palacio estaba sometida a un durísimo tratamiento de quimioterapia sin garantía de éxito.

El coraje es una característica muy femenina. Con coraje Ana Palacio dijo sí a Aznar y con coraje ha actuado ahora Carmen Chacón, no por su embarazo, sino por el cometido que se le ha encargado. Muchos de los militares con los que tendrá que despachar podrían ser su padre y ninguno, ni joven ni mayor, se ha visto nunca en una situación así. Salvando las distancias, el impacto de esta novedad es muy comparable al que produjo el nombramiento de Soraya Sáenz de Santamaría. "¿Cómo va a lidiar un grupo parlamentario en el que hay tanto colmillo retorcido?", se han preguntado muchos. Pues, con coraje y mano izquierda, con mano de hierro en guante de terciopelo. Y de todo esto la nueva ministra está muy bien dotada. Zapatero ha querido sorprender y ha sorprendido. De Bono a Chacón la distancia es casi infinita.

Además de tanta 'primera vez', el Presidente ha tratado de dar satisfacción a los territorios y de saldar deudas con amigos, como Miguel Sebastián. A otros, como a Jesús Caldera, le ha buscado un acomodo en lo que va a ser la FAES socialista, no esperando a dejar el poder para organizar un laboratorio de ideas, que fue lo que hizo Aznar cuando abandonó Moncloa. De todos modos, algo ha ocurrido con Caldera, algún lazo se ha roto o algún afecto se ha quebrado.

El nuevo Gobierno admite muchos flancos para el análisis y, a la espera de acontecimientos, resulta llamativo que Vivienda, asunto en el que Gobierno apenas sí tiene competencias, cuente con un ministerio y que Inmigración comparta atención con la cartera de Trabajo, que también de por sí va a merecer especiales esfuerzos y recursos. De momento, toca el período de gracia, pero Zapatero, muy amigo de gestos y sorpresas, ha conseguido lo que sin duda quería: sorprender y esto no es 'la primera vez' que ocurre.

Charo Zarzalejos

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