- Se estima que en la última década hasta el 40% de las mujeres mayores de 50 años van a sufrir osteoporosis
MADRID, 20 Nov. (OTR/PRESS) -
En los próximos veinte años, la tendencia demográfica provocará un incremento de las enfermedades relacionadas con los huesos y las articulaciones que llegará a duplicarlas, según los expertos reunidos hoy en una conferencia en la Real Academia Nacional de Medicina (RANM). Concretamente se estima que hasta un 40% de las mujeres, mayores de 50 años, lleguen a sufrir osteoporosis, un trastorno que se caracteriza por la pérdida progresiva de masa ósea.
El presidente de la Comisión Nacional de Cirugía Ortopédica y Traumatológica, Luis Munuera, cree que el impacto de estas enfermedades va a ser tan importante que ya desde hace 6 años y a iniciativa de la OMS, nos encontramos en la 'Década de los huesos y de las articulaciones'". "El objetivo de esta iniciativa es estudiar y analizar todas las posibilidades para mejorar el diagnóstico y manejo de estas patologías y reducir su impacto en la población", explicó Munuera.
También aseguró que durante esta década, del 2000 al 2010, se dedicará "especial atención a debatir y poner en común todos los avances terapéuticos" para hacer frente a trastornos como la osteoporosis y las fracturas, "que se duplicaron en la última década y que afectarán a un 40% de las mujeres mayores de 50 años".
PROBLEMA SANITARIO DE PRIMER ORDEN
La osteoporosis produce en España alrededor de 90.000 fracturas de cadera y 500.000 fracturas vertebrales cada año. Para el profesor Munuera, "la osteoporosis debería ser considerada como un problema sanitario de primer orden. Aspectos como la escasa calidad de vida de los pacientes, la importante demanda asistencial que generan, su impacto socioeconómico y el progresivo envejecimiento de la población, que va a incrementar estos problemas, son aspectos suficientes para que se considere la magnitud de este problema".
El progresivo envejecimiento de la población y los hábitos y estilos de vida (sedentarismo, consumo de alcohol y tabaco, la dieta rica en grasas saturadas, etc.) son responsables del aumento de las enfermedades óseas y de las articulaciones. "Además de evitar los factores de riesgo se deberían llevar a cabo una serie de medidas preventivas a lo largo de toda la vida como son consumir una dieta rica en calcio y vitamina D, realizar ejercicio físico moderado de forma regular y no fumar".
"Estas recomendaciones son válidas no sólo cuando ya se sufre una osteoporosis y se sigue un tratamiento farmacológico, sino también cuando la densidad ósea es normal pero el hueso ya ha empezado a sufrir una disminución de la densidad, lo que conocemos como ostopenia".
OPERACIONES QUIRÚRGICAS
En la mayoría de los casos, el tratamiento de las fracturas del hueso y las articulaciones implica una intervención quirúrgica. Según el tipo de fractura, su localización, el estado del enfermo y su situación funcional previa, se optará por un tipo determinado de intervención. El objetivo del tratamiento es dotar de solidez y estabilidad a la articulación para que el paciente recupere la movilidad.
En este sentido, los especialistas ven el futuro de los tratamientos traumatológicos en el diseño de implantes de fijación y prótesis adaptados a las características biomecánicas del débil tejido osteoporótico, en el uso de biomateriales bioactivos para reforzar su frágil estructura y en la estimulación de las células madre adultas mediante factores osteoinductores o terapia génica.