Fermín Bocos.- El recibo de la luz

MADRID 17 May. (OTR/PRESS) -

Entre la crisis del PP -que no cesa, va a más y amenaza con descabalgar a Mariano Rajoy- y la sentencia en el caso del fallido intento del abogado de la ciudadana Telma Ortiz para reinstaurar la censura previa, nos vamos olvidando de que el Gobierno ve con buenos ojos la subida del recibo de la luz. Más de un 11%. Un abuso. Y una evidencia del verdadero "talante" social del Gabinete que preside el señor Rodríguez Zapatero, tan osado a la hora de plantear medidas cosméticas que afectan a las costumbres y tan tímido a la hora de relacionarse con los grandes "lobbys" económicos del país.

El cinismo con el que el flamante ministro de Industria, Miguel Sebastián, habla de la subida -"Un 11% es menos que el 30% del que se venía hablando"- delata al personaje y, de paso, arroja luz acerca de su personalidad autoritaria. No se puede decir más con menos palabras. En un dirigente dizque próximo a la socialdemocracia cabría esperar algún tipo de reflexión capaz de relacionar lo inoportuno de la subida con lo innegable de la crisis económica que afecta, sobre todo, a las clases populares, a los asalariados que no son funcionarios. Tampoco habría estado de más que desde el Gobierno alguien hubiera recordado a las compañías eléctricas que hace diez años recibieron una subvención de nada menos que un billón doscientos mil millones de pesetas para ponerse al día y afrontar la competencia europea.

Por no hablar del sarcasmo que entraña publicar, como ha hecho la dirección de Endesa, que en el último trimestre han obtenido más de 600 millones de euros de beneficios al tiempo que, como el resto de las compañías, reclama autorización para subir el precio del recibo de la luz. En estas condiciones, subir la luz, no es de recibo.

Fermín Bocos.