José Cavero.- Barreda vuelve a discrepar de ZP.

MADRID 17 Nov. (OTR/PRESS) -

El presidente de la comunidad caste llano-manchega, José María Barreda, se ha venido caracterizando en los últimos tiempos por discrepar o disentir de algunas de las iniciativas de su "jefe natural", el secretario general del PSOE, y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Barreda parece que había quedado satisfecho, en las últimas semanas, con dos novedades recientes: primera, que se atendió su deseo de que el Gobierno fuera modificado y potenciado en sus figuras políticas, y además, por convertirse en secretario-portavoz del comité territorial del PSOE; que reúne a los barones territoriales con los restantes altos cargos de la administración pública, todos con el mismo carnet. Barreda parecía satisfecho con estas prerrogativas... Pero no ha sido suficiente, y anoche, en la televisión "La Diez" de Vocento, Barreda se explayaba con ideas propias y distintas a las de Zapatero en materia de confesionalidad.

Exactamente, sostiene Barreda que el discurso laicista de Zapatero puede tener una rentabilidad electoral en determinadas comunidades autónomas, pero no tienen buen acomodo en regiones como Castilla-La Mancha. "La inmensa mayoría de la población se declara católica y hay que gobernar para la inmensa mayoría, respetando a las minorías", afirmó Barreda cuando se le preguntó por el mitin del pasado domingo en Barcelona, en el que Zapatero aseguró que España ha vivido "décadas y décadas" en las que se han tenido que aceptar "las leyes, los códigos de conducta y una determinada forma de ver la vida y la religión".

Según relata el diario ABC, del mismo grupo editorial que La Diez de Vocento, no fue ésta la única discrepancia que el presidente castellano-manchego expresó con respecto a la política del Gobierno. También se mostró crítico con lo sucedido en el Sáhara, aunque consideró que a Zapatero "le ha podido la responsabilidad de Estado de querer llevarse bien con un vecino, Marruecos, que es importantísimo desde un punto de vista geopolítico, entre otras cosas para contener al fundamentalismo en el norte de África".

En relación con la política económica, admitió que los socialistas han tomado medidas, como la reforma laboral o la congelación de las pensiones, que "rompen con la historia de los socialistas", y por eso abogó por "hacer pedagogía y explicar medidas impopulares que no son comprendidas". En cualquier caso, también en este punto quiso alejarse de Moncloa, pues al contrario de lo que ha hecho Zapatero, "en Castilla-La Mancha no hemos subido los impuestos ya que forma parte del pacto entre los agentes sociales". Ya metido en asuntos más domésticos, volvió a rechazar la creación de una comisión de investigación sobre el caso de Caja Castilla-La Mancha, que según él ha sido ampliamente debatido en las Cortes regionales. Y además convocó a un debate a su contrincante, María Dolores de Cospedal, que también estará en Noche 10 para contestar a las preguntas de los contertulios del programa. Será el próximo jueves, dentro del programa que conduce Ángel Expósito.

En el seno del PSOE se explica el nerviosismo de Barreda precisamente por la incertidumbre que le suponen las elecciones de marzo próximo, cuando deberá confrontar su propia candidatura con la de la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal. Según las encuestas, la situación está muy empatada, y no resultará fácil inclinarse por uno u otra...