Archivo - Sistema de regadío en un cultivo.
Archivo - Sistema de regadío en un cultivo. - JUNTA - Archivo
Publicado: lunes, 18 julio 2022 14:57

   BRUSELAS, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

   España y otros cuatro países de la UE tendrán que hacer frente a la caída de rendimientos de los cultivos a causa de la sequía y la falta de agua, según se desprende del informe 'La sequía en Europa' publicado este lunes por el Centro de Investigaciones de la Comisión Europea.

   El informe apunta que los cultivos en España, Portugal, Italia, Francia y Rumanía podrían ver reducida su productividad por las consecuencias del estrés hídrico, y apunta que otros cinco países como Alemania, Polonia, Hungría, Eslovenia y Croacia también corren el riesgo de verse afectados.

   Además, en España los reservorios de agua se encuentran en niveles que suponen el 69% de la media de los últimos diez años. En este sentido, el documento subraya que este indicador desciende a la mitad de la media de los últimos diez años en regiones del sur como Andalucía y Extremadura.

   El informe destaca la dificultad de la situación en la Península Ibérica teniendo en cuenta que, además, en Portugal las presas hidráulicas para la producción de electricidad se encuentran a mitad de los niveles medios de los últimos siete años, un problema que también afecta a España.

   En un paso más, el documento manifiesta que las condiciones estrés hídrico en España y Portugal son "favorables" para los incendios y hace hincapié en que que la reducción de las aguas subterráneas ha generado estrés en la vegetación en el norte de España, así como en el sur de Italia, en el centro y oeste de Francia, en el centro de Alemania, el este de Hungría y Portugal.

   En su análisis revela que una parte importante del territorio comunitario que representa el 46% del total, se encuentra expuesta a niveles de alerta de sequía, lo que genera estrés para la población vegetal.

   La comisaria europea de Economía y Sociedad Digital, Mariya Gabriel, ha indicado que el cambio climático "ha aumentado el riesgo de graves sequías e incendios en todo el mundo".