El Abad de Montserrat ve "normal" recibir al Papa con 'senyeres'

BARCELONA 14 Oct. (EUROPA PRESS) -

El abad de Montserrat, Josep Maria Soler, considera "normal" la presencia de 'senyeres' en los actos masivos durante la visita del Papa a Barcelona el 6 y 7 de noviembre para dedicar el templo de la Sagrada Familia al culto.

En declaraciones a Europa Press, Soler se ha referido a esta cuestión señalando como "normal el hecho de que haya banderas del país que lo recibe". "Como creo que las habrá también gallegas en Santiago de Compostela", ha añadido, al tiempo que ha apuntado la posibilidad de que también haya banderas españolas.

En cualquier caso, ha señalado que "lo importante" no son las banderas, sino el mensaje y la reflexión que estimulará Benedicto XVI con su viaje a la capital catalana.

El abad ha efectuado las citadas declaraciones tras un desayuno promovido por el Fórum Europa Tribuna Cataluña, en el transcurso del cual ha señalado: "Valoro la libertad de la gente que quiera llevar una bandera, también la del Vaticano".

"Pero debe haber una dimensión relacionada con la realidad de Cataluña, como también sucederá en Galicia", ha defendido el abad, que ha insistido en los valores de reflexión que aportará la visita papal, que ha augurado respetuosa, "sin un tono fuerte ni agresivo" para con el Gobierno y leyes concretas.

Ha señalado que la postura de la Santa Sede es "respetuosa con los gobiernos, democráticamente escogidos" y "dialogante, a veces con acuerdos, y a veces sin".

Soler se ha mostrado esperanzado en que la visita "sea un momento que alente a vivir un momento de fe y una proyección importante de Barcelona y la Sagrada Familia".

"Creo que va a ser muy positiva, no sólo para los creyentes, sino para la sociedad en general porque nos ayudará a reflexionar sobre temas importantes, y va a ser un impulso para la fe", ha señalado a Europa Press.

PROTESTAS DE MOVIMIENTOS CRÍTICOS

Respecto a las posibles protestas que rodearán la visita, ha aseverado que "cada uno es libre para manifestar lo que piensa sobre la visita", pero ha pedido que las críticas se canalicen por los "cauces normales" de una sociedad democrática y cívica.

Además, se ha mostrado "comprensivo" con el hecho de que Benedicto XVI no pueda visitar la Abadía de Montserrat, por el "apretado horario" y su avanzada edad. De hecho, no llegó a invitarlo porque sabía que la de Barcelona era una "visita reducida".