Actualizado: viernes, 26 febrero 2010 0:58


SANTIAGO DE COMPOSTELA, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Dirección Xeral de Emerxencias de la Xunta ha transmitido un aviso a 23 ayuntamientos ubicados río abajo del embalse de Belesar (Ourense) para advertirles de que adopten las medidas necesarias ante la posible crecida del río Miño debido a las intensas lluvias caídas en las últimas horas, que han obligado a abrir las compuertas de la presa.

Esta situación podría afectar a los ayuntamientos de O Saviñao, Chantada, Carballedo, Nogueira de Ramuín, Pantón, A Peroxa, Coles, Pereiro de Aguiar, Ourense, Toen, Castrelo de Miño, Cenlle, Ribadavia, Arnoia, Cortegada, Crecente, Arbo, As Neves, Salceda de Caselas, Tui, Tomiño, O Rosal y A Guarda, todos ellos ubicados río abajo y con cuyos responsables están contactando los técnicos de Emerxencias para alertar de las posibles crecidas derivadas de la apertura de las compuertas.

La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil informó de que los responsables del embalse procedieron a la apertura de compuertas ante los niveles que estaba alcanzando, de tal forma que se está liberando un caudal de 900 metros cúbicos por segundo.

RÍOS DESBORDADOS

Las intensas lluvias de las últimas horas han provocado una situación complicada en los ríos en la provincia de Ourense, hasta el punto de que se han registrado incidentes como que en el municipio de Calvos de Randín, en el lugar de Vilar, la crecida del cauce fluvial se llevó por delante un puente, lo que dificulta el acceso de los vecinos al centro del municipio.

Por su parte, en Oimbra, el desbordamiento do río Támega a su paso por la localidad de Rabal anegó un área recreativa y se aproximó a las viviendas. Una circunstancia similar ocurrió en el enlace entre o ayuntamiento y la autovía, que quedó impracticable, y en la localidad de Monterrei, donde el desbordamiento del mismo río a su paso por la parroquia de Vilaza, anegó con dos metros de agua el centro de salud y un bar colindante.

Los ríos Miño, Neira y Azumara también se desbordaron, el primero en varios puntos, mientras que el Neira, fue a su paso por O Páramo (Lugo) y el Azumara en Castro de Rei (Lugo). Las intensas lluvias propiciaron también que, además del embalse de Belesar, se tuvieran que aliviar los de Portodemouros y Barrié de la Maza, en A Coruña; y los de Avia, Peares, Velle, Castrelo, Frieira y Cunchas, entre las provincias de Lugo y Ourense.

MÚLTIPLES INCIDENCIAS

En total, el centro de atención de emergencias del 112 gestionó entre la pasada medianoche y las 19.00 horas de hoy un total de 430 incidencias registradas en 153 ayuntamientos, todas relacionadas con los fenómenos meteorológicos adversos que sufre la comunidad gallega, que permanece en alerta naranja por lluvia y viento y en alerta roja --riesgo extremo-- por fenómenos costeros, lo que provocará una navegación peligrosa.

En concreto, las incidencias registradas son 259 por caídas de árboles, 40 por carreteras, garajes y viviendas anegadas y 42 por caídas de postes y cables de la luz, así como una treintena por desprendimientos de tierras y piedras en las calzadas, donde también se han registrado baches y socavones por la acción de las lluvias, que también han dejado bolsas de agua que dificultan la circulación.

Además, una persona resultó herida por la caída de tejas y trozos de cornisas en la localidad ourensana de O Carballiño, mientras que otra resultó lesionada por un letrero en la ciudad de A Coruña debido al fuerte viento registrado.

No obstante, la lluvia y el viento seguirán sin dar tregua en las próximas horas en la Comunidad gallega, que sufrirá vientos de fuerte intensidad, sobre todo en la mitad norte, y la Dirección Xeral de Emerxencias alerta de que las condiciones podrían empeorar para el fin de semana, tras una ligera mejoría durante la jornada de este jueves.