MADRID, 25 Dic. (EUROPA PRESS) -
El arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), cardenal Juan José Omella, ha reclamado a los políticos y a las instituciones públicas y privadas que "pongan los medios necesarios para que esta nueva crisis social y económica pase cuanto antes".
"En eso se concreta ahora su vocación de servicio al bien común, sin el cual no existe una verdadera caridad política", ha manifestado el purpurado en su mensaje de Navidad, marcado por la pandemia de la Covid-19 y sus efectos.
De este modo, Omella ha afirmado que "aquella primera Navidad" deja algunas enseñanzas que pueden ayudar en la actualidad. "La humildad, la acogida del que viene de lejos, el compartir con el que no tiene nada. Valores tan necesarios en nuestro tiempo, aquí y ahora", ha detallado.
El cardenal ha recordado que este año ha tenido lugar la pandemia del nuevo coronavirus, que ha causado "mucho dolor" y "se ha llevado la vida de muchas personas". "Estos meses han sido y siguen siendo muy difíciles para todos nosotros", ha recalcado, para apuntar las ausencias y dificultades económicas que viven muchas familias.
Pese a todo, el cardenal ha añadido que, "en medio de la oscuridad", este año también se ha visto "brillar muchas luces que han permitido mantener la esperanza". "Han sido los sanitarios, los médicos, los sacerdotes en los hospitales, los militares en las residencias de ancianos, los responsables de logística, de limpieza, de los servicios básicos, los trabajadores en los supermercados, en los colegios. Tantas y tantas personas e instituciones sociales", ha subrayado.
En este sentido, el presidente de la CEE ha afirmado que estos tiempos de crisis "han mostrado la oscuridad de algunos corazones, pero también, sin duda, la grandeza de ánimo de tantas personas que, olvidadas de sí mismas, han salido a ayudar al otro, por encima de cualquier otra consideración".
"Lo han hecho, en muchas ocasiones, arriesgando la propia seguridad. Desde el fondo de nuestro corazón: ¡muchas gracias! Eso es signo de que en nuestra sociedad hay gran reserva de humanidad", ha celebrado, para después pedir "un esfuerzo más" en el cuidado de los más pobres y necesitados, y animar "a construir una fraternidad abierta".
