ROMA, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco ha subrayado este miércoles durante la audiencia general que por la salvación no se paga para advertir a los fieles de que no se dejen engañar durante este Año Santo de la Misericordia por quienes les pidan pagar por cruzar las Puertas Santas, aquellas que los católicos deberán atravesar para obtener la indulgencia plenaria, el perdón de sus pecados.
"La Puerta es Jesús, y Jesús es gratis. Atravesar la Puerta Santa es el signo de nuestra confianza en el Señor Jesús que no vino para juzgar sino para salvar, es el signo de una verdadera conversión de nuestro corazón. Cuando crucemos esa puerta es bueno recordar que también debemos mantener abierta la puerta de nuestro corazón. Que también nuestra puerta esté siempre abierta para no excluir a nadie", ha pedido.
Cada una de las basílicas de Roma tiene una puerta santa que habitualmente están selladas y que solo se abren durante un Jubileo. Además, en esta ocasión, el Papa ha querido que este signo estuviera presente en cada Iglesia particular para que todas las personas del mundo puedan compartir el Jubileo. Así, por ejemplo, en España han abierto las Puertas Santas de sus catedrales tanto el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, como el de Madrid, Carlos Osoro.
El Pontífice ha manifestado su deseo de que la comunión eclesial sea cada vez más intensa, para que la iglesia sea en el mundo el signo viviente del amor y de la misericordia del Padre y ha añadido que "la misericordia y el perdón no deben quedarse en meras palabras bonitas, sino realizarse en la vida cotidiana" como "un programa de vida que no puede tener interrupciones o excepciones".
También ha destacado que la confesión es un signo importante del Jubileo. "Recibir el sacramento con el cual nos reconciliamos con Dios --ha precisado-- es tener una experiencia directa de su misericordia. Pero, ¿cómo se puede pedir a Dios que nos perdone si luego nosotros no somos capaces de perdonar?". Finalmente, ha invitado a todos los fieles a vivir el Jubileo con "valor".
