Archivo - El Papa León XIV recorre la plaza de San Pedro en Papamóvil en una fotografía de archivo. - Stefano Spaziani - Europa Press - Archivo
MADRID 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Papa León XIV ha pedido "devolver la paz" a Sudán, país asolado por la violencia, el cólera y sacudido este martes por un deslizamiento de tierras que ha causado la muerte de unas mil personas, y ha exigido la apertura de corredores humanitarios.
"Hago un llamamiento de corazón a los responsables y a la comunidad internacional para que garanticen los corredores humanitarios y pongan en marcha una respuesta coordinada para detener esta catástrofe humanitaria. Es hora de iniciar un diálogo serio, sincero e integrador entre las partes, para poner fin al conflicto y devolver la esperanza, la dignidad y la paz al pueblo de Sudán", ha reclamado el Pontífice, al final de la audiencia general de este miércoles.
Según ha indicado León XIV, desde Sudán, en particular desde Darfur, llegan "noticias dramáticas". En concreto, ha recordado que "en El Fasher, numerosos civiles están atrapados en la ciudad, víctimas de la escasez y las violencias", y que en Tarasin, "un deslizamiento de tierra devastador ha causado numerosas muertes, dejando tras de sí dolor y desesperación". A esto se suma, según ha apuntado, "la propagación del cólera" que "amenaza a cientos de miles de personas ya agotadas".
Por ello, ha asegurado su cercanía y sus oraciones por los habitantes del país africano. "Estoy más cerca que nunca del pueblo de Sudán, especialmente de las familias, los niños y los desplazados. Rezo por todas las víctimas", ha afirmado.
Por otro lado, durante su catequesis, ante los numerosos fieles congregados en la Plaza San Pedro del Vaticano, a quienes saludó durante una vuelta en papamóvil antes del comienzo de su meditación, el Papa ha hablado de las fragilidades del ser humano.
"Vivimos en una época que premia la autosuficiencia, la eficiencia, el rendimiento. Sin embargo, el Evangelio nos muestra que la medida de nuestra humanidad no la da lo que podemos conquistar, sino la capacidad de dejarnos amar y, cuando es necesario, también ayudar", ha indicado.
El Obispo de Roma ha centrado su reflexión en el pasaje evangélico de Juan, que relata "el momento más luminoso y a la vez más oscuro de la vida de Jesús", es decir, los últimos instantes antes de su muerte, en el cual dice que tiene "sed" y se le ofrece una esponja empapada en vinagre.
En este sentido, León XIV ha señalado que "no hay nada más humano, nada más divino, que saber decir: necesito". Por ello, ha invitado a vivir "en la fraternidad, en la vida sencilla, en el arte de pedir sin vergüenza y de ofrecer sin cálculo".