GARISSA (KENIA), 27 Jul. (EP/AP) -
El Programa Mundial de Alimentos (PAM) de Naciones Unidas, negó hoy que sus raciones de alimentos no tienen nada que ver en el brote de intoxicación masiva que ha enviado a 37 refugiados somalíes al hospital.
Todos los afectados se alojaban en los campos de refugiados de Dadaab, en el norte del país, donde comenzaron a presentar síntomas de diarrea, fiebre, vómitos y dolor abdominal. Su dieta incluía el maíz donado por Estados Unidos, pero es frecuente que los refugiados mezclen su comida con leche de camello, un alimento que no procede de las agencias de ayuda.
Uno de los portavoces del PAM, Isaiah Ofuyo, declaró que las raciones no son la fuente de la intoxicación, "según han mostrado las pruebas realizadas en los laboratorios" de la organización.
