LUGO, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las intensas lluvias que en las últimas horas han provocado un caos en A Mariña Lucense, con inundaciones y numerosos daños en infraestructuras, han llevado a los alcaldes de la zona a plantear la necesidad de solicitar "la declaración de zona catastrófica" para habilitar líneas de ayudas, puesto que advierten que las arcas municipales no podrán afrontar la reparación de tal cantidad de daños.
Así, el alcalde de Burela (Lugo) --una de las zonas más castigadas--, el popular Alfredo Llano, anunció que pedirá "la declaración de zona catastrófica" tras el temporal de lluvia que aún no ha remitido, una opción que su homólogo de Ribadeo, el nacionalista Fernando Suárez, tampoco lo descarta y avanzó que está estudiando esta opción.
No obstante, es preciso puntualizar que la declaración de zona catastrófica ya no está vigente en el ordenamiento jurídico español, sino que existe una nueva figura de ayudas de emergencia recogida en el Real Decreto del 18 de marzo de 2005, que regula las subvenciones para atender a necesidades derivadas de situaciones de emergencia o de naturaleza catastrófica.
En todo caso, lo que demandan los regidores de esta zona de la provincia de Lugo es que se activen ayudas públicas que apoyen la reconstrucción de infraestructuras básicas y las labores de limpieza después de las riadas que han estropeado calzadas e incluso se llevaron por delante puentes, como es el caso del de la parroquia de Arante, en Ribadeo, que fue arrasado por las lluvias.
CONTINÚAN LAS COMPLICACIONES
Así, el alcalde de Burela alertó de que hoy, pese a que siguen las precipitaciones, el caudal de ríos y regatos "bajó", pero las "complicaciones" son las mismas de ayer, cuando actuó con más virulencia este temporal en puntos como A Casilla, Vila do Medio o Perdouro.
Asimismo, alertó de que, "en cualquier momento pueden aparecer nuevos embolsamientos de agua al igual que ocurrió ayer", de forma que, por medida de precaución, se ha suspendido la prueba del campeonato gallego de motos acuáticas, prevista para mañana sábado. Alfredo Llano subrayó que reparar todos los daños será "cuantioso".
Por su parte, en Ribadeo varias parroquias permanecen sin agua debido al desplome de un tramo de la carretera que une Reme con Vilamar en Lexoso, arrasó las tuberías de suministro y se ha complicado hacer un 'bypass'. Asimismo, siguen con dificultades las zonas de Arante, Covelas y Vilaframil, que sufren cortes en el suministro eléctrico.
El regidor relató que "todas las brigadas municipales llevan horas trabajando para tratar de recuperar poco a poco la normalidad, aunque llevará semanas". "Las de ayer fueron horas dramáticas, difíciles, nunca vistas", destacó.
Por ello, Fernando Suárez hizo hincapié en la necesidad de que se establezcan "planes de ayudas y de actuación" para la limpieza de los ríos y "para paliar los cuantiosos daños causados a particulares además de los sufridos por las carreteras y puentes". "Los ayuntamientos no tienen posibilidades económicas para afrontar este desastre", advirtió.
PREDICCIONES
Por su parte, la Agencia Estatal de Meteorología mantiene la alerta amarilla en todo el litoral lucense por precipitaciones que pueden llegar a ser de 40 litros por metro cuadrado.
Según fuentes de la agencia, en cuanto a sus previsiones, que se hacen en intervalos de 12 horas, "lo peor" se prolongará hasta las 21.00 horas de esta noche, mientras que a partir de ese momento se pronostica "una tregua", con lluvias previstas de 4,8 litros por metro cuadrado.
Por cuanto a las carreteras de A Mariña, todas las secundarias se encuentran con problemas, según distintas fuentes, además de que se mantiene cortada la autonómica LU-13.
