A CORUÑA 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Distrito Sur de la Policía Nacional detuvo en A Coruña a un vigués de 18 años acusado de robar maquinaria en una obra y de causar daños en la misma. La suma de lo sustraído y lo dañado asciende hasta los 3.000 euros.
La denuncia fue presentada el mes pasado por el propietario de una empresa por el hurto de diversas herramientas de carpintería en varias obras. La primera sustracción data de finales del año pasado, cuando notó la falta de un taladro, una caladora y una fresadora. Además, en enero del 2007 fueron sustraídas una ingletadora y una clavadora, y en marzo una matizadora.
El denunciante se decidió a hablar con el principal sospechoso, B.G.Z., en el mes de abril y ese mismo día, después de la conversación, encontró diversos destrozos en la obra, según informó la Policía Nacional.
Las pesquisas policiales realizadas y las declaraciones de los testigos en relación con los hechos llevaron a la detención del joven, que no obstante quedó en libertad con cargos hasta que tenga que comparecer ante la Autoridad Judicial cuando sea requerido para ello.
DELITO DE LESIONES
Además, en la zona del Orzán, fue arrestado un joven de 22 años acusado de un delito de lesiones ocasionado por una pelea. Los hechos comenzaron con un saludo en el que el denunciante golpeó reiteradamente al denunciado en los testículos, un hecho que provocó que el arrestado le respondiera con un puñetazo en el estómago que desembocó en una pelea.
Finalmente el detenido propinó un puñetazo en la cara al demandante, aunque después en Comisaría aseguró que no pretendía provocarle daños. El joven fue puesto en libertad con cargos hasta que comparezca ante la Autoridad Judicial.
TIRÓN DE UN BOLSO
Por otra parte, un hombre de 34 años fue arrestado acusado de intentar robar una cartera con un tirón con violencia e intimidación, además de resistencia a la autoridad. El acusado, P.M.F.F., intentó robar una cartera a una mujer en la calle Juan Florez de A Coruña mediante un tirón y arrastrando por el suelo a la víctima. La mujer fue auxiliada por su hija que consiguió alcanzar al ladrón y recuperar la cartera, aunque fue agredida con un puñetazo en la cara por parte de éste.
Un coche camuflado de la policía logró encontrar al hombre y, cuando los agentes trataron de proceder a la identificación, éste se intentó escapar golpeando, insultando y escupiendo a los agentes, aunque finalmente fue arrestado y puesto a disposición judicial.