MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
Cada verano, el cielo nocturno ofrece un espectáculo natural que fascina a millones de personas alrededor del mundo: la lluvia de estrellas fugaces, conocida popularmente como las 'Lágrimas de San Lorenzo'.
Este fenómeno, oficialmente denominado Perseidas, alcanza su máximo esplendor entre la noche del 11 y 12 de agosto, cuando la Tierra atraviesa la nube de partículas dejada por el cometa Swift-Tuttle. Para los amantes de la astronomía y los viajeros en busca de experiencias únicas, observar este evento es un plan ideal.
Las Perseidas, que tienen lugar cada año en agosto, son en realidad meteoros, partículas de polvo dejadas por este famoso cometa. Este espectáculo celeste, visible en su máximo esplendor durante la noche veraniega, atrae a miles de personas alrededor del mundo.
Entre las recomendaciones para disfrutar al máximo de este fenómeno destaca la importancia de alejarse de las fuentes de luz y permitir que los ojos se adapten a la oscuridad durante al menos 20 minutos. Además, es recomendable centrar la mirada en la zona noreste del cielo, donde se encuentra la constelación de Perseo, de donde parecen emanar las estrellas fugaces.
La hora óptima para observar la lluvia de Perseidas es después de la medianoche, hasta el amanecer, cuando la radiante se encuentra más alta en el cielo.
Conscientes de la creciente popularidad de este fenómeno, la plataforma de viajes Viajeros Piratas ha seleccionado siete destinos inmejorables para disfrutar de las Perseidas.
Desde paisajes volcánicos hasta románticos lagos y desiertos, estos lugares ofrecen la combinación perfecta de cielos despejados y paisajes espectaculares para observar este evento astronómico en todo su esplendor.
TENERIFE, JORDANIA O ISLANDIA.
El primero de los destinos para disfrutar de este fenómeno natural es El Teide en Tenerife, la mayor de las Islas Canarias que ofrece siempre vistas de postal y hermosas playas para todos los gustos.
Durante la noche del 11 al 12 de agosto, el cielo sobre la isla se iluminará con cientos de estrellas fugaces, creando un escenario mágico para todos aquellos que deseen admirar el firmamento en su máximo esplendor.
El Parque Nacional del Teide, con su altitud de más de 2.000 metros y su aire claro y limpio, es uno de los mejores lugares de la isla para observar este fenómeno. Aquí se encuentra el Observatorio Astronómico del Teide, reconocido internacionalmente por sus condiciones excepcionales para la observación estelar.
Durante la noche de las Perseidas, el observatorio y sus alrededores ofrecen una vista despejada y sin interferencias de la contaminación lumínica, permitiendo a los visitantes disfrutar de un cielo estrellado inigualable.
Este evento anual no solo atrae a aficionados de la astronomía, sino también a turistas en busca de experiencias únicas en la naturaleza. Tenerife, con su clima cálido y sus cielos despejados, se consolida así como un destino perfecto para disfrutar de este fenómeno celestial en todo su esplendor.
Jordania es una tierra mágica, rica en ciudades antiguas y dominada por el desierto de Wadi Rum, uno de los entornos más fascinantes del mundo, con sus grandes extensiones de arena roja y colinas de arenisca que recuerdan a la superficie de Marte.
Pasar una noche en el Memories Aicha Luxury Camp, un glamping de lujo en esta privilegiada ubicación, es una experiencia increíble que hay que vivir al menos una vez en la vida, sobre todo si se quiere admirar la inmensidad del cielo estrellado.
Para quienes prefieren temperaturas más frescas, Islandia, con su naturaleza salvaje y sus impresionantes paisajes, es sin duda el destino ideal para disfrutar de esta lluvia de estrellas. Este es también un destino muy popular desde el que poder admirar espectaculares auroras boreales.
Islandia es famosa por su vasto y variado paisaje, que incluye volcanes, glaciares, cascadas y campos de lava. Estos impresionantes escenarios naturales no solo proporcionan un telón de fondo perfecto para observar las Perseidas, sino que también ofrecen la oportunidad de combinar esta experiencia con la exploración de algunos de los lugares más icónicos de la isla. Desde las tierras altas del interior hasta las playas de arena negra en la costa sur, cada rincón de Islandia ofrece una perspectiva única para disfrutar de este evento astronómico.
Quien visite Alemania en verano, no debe perderse la Reserva Westhavelland. Situada a sólo 70 kilómetros al oeste de Berlín, es la primera zona de Alemania a la que se concede la categoría de parque estelar.
Este refugio natural ofrece un entorno ideal para la observación astronómica, lejos de la contaminación lumínica urbana. Durante la lluvia de Perseidas, el cielo de Westhavelland se ilumina con miles de estrellas fugaces, ofreciendo una vista espectacular de la Vía Láctea en todo su esplendor. Es un destino imprescindible para los amantes del cielo nocturno que buscan una experiencia única en contacto con la naturaleza.
La quinta propuesta nos lleva hasta Eslovenia. Con su encantador paisaje de cuento de hadas, el lago Bled está considerado uno de los lugares más románticos de Eslovenia. Para una experiencia aún más envolvente, es posible alojarse en lujosas casas en los árboles equipadas con sauna y bañera de madera exterior desde la que observar el cielo estrellado.
La región de Alentejo, en el sur de Portugal, es otro destino ideal para disfrutar de la lluvia de Perseidas. Conocida por su tranquilidad y vastos paisajes, esta región ofrece cielos despejados y poca contaminación lumínica, perfectos para la observación del firmamento.
El hotel rural Sobreiras, rodeado de un entorno natural intacto, brinda a los visitantes una experiencia inmersiva en la naturaleza. Durante la noche del 11 al 12 de agosto, el cielo de Alentejo se convierte en un escenario mágico, donde las estrellas fugaces cruzan el firmamento, ofreciendo un espectáculo inolvidable en un ambiente sereno y apacible.
Y para finalizar el Parque Nacional de Gauja en Letonia. Se trata de la mayor extensión natural de Letonia, a unos 50 kilómetros de Riga, la capital. Esta zona es conocida por su belleza y el verdor de sus paisajes.
La Treehouse Ciekurs es una opción de alojamiento idóneo para disfrutar de la naturaleza, lejos del mundanal ruido. Rodeado por el bosque de pinos y a la orilla de un lago, es el escenario perfecto para disfrutar de una lluvia de estrellas.
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