El consejero delegado de Ryanair, Michael O'Leary, ofrece una rueda de prensa en la sede de Ryanair, a 8 de octubre de 2025, en Madrid (España)- Fernando Sánchez - Europa Press
MADRID 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
Ryanair registró un beneficio neto de 2.540 millones de euros en los primeros seis meses de su año fiscal, finalizado el pasado 30 de septiembre, lo que supone un incremento del 42% respecto a las ganancias de 1.790 millones obtenidas en el mismo periodo del ejercicio anterior, según ha informado este lunes la compañía en un comunicado.
Los ingresos de la aerolínea 'low cost' crecieron un 13% entre abril y septiembre de 2025, hasta los 9.820 millones de euros, Los ingresos por la venta de billetes se incrementaron un 16%, hasta 6.910 millones, impulsados por el aumento de tarifas y tráfico. Los ingresos complementarios (servicios adicionales) también mostraron solidez, con un crecimiento del 6%, hasta los 2.910 millones de euros.
A pesar de los desafíos del sector, la aerolínea ha logrado mantener un estricto control de costes. Los costes operativos aumentaron solo un 4%, lo que se traduce en un incremento de apenas el 1% por pasajero, hasta los 6.960 millones de euros. O'Leary atribuyó esta contención a las extensas coberturas de combustible, que lograron mitigar el alza del 14% en las tasas de control de tráfico aéreo y el aumento de los costes medioambientales.
La compañía ha explicado que el aumento de sus beneficios se debe a un crecimiento del tráfico del 3%, hasta alcanzar la cifra récord de 119 millones de pasajeros, así como a un incremento de las tarifas del 13%, impulsado por la positiva acogida de la Semana Santa, la menor base de comparación respecto al año anterior y la recuperación de las tarifas en el segundo trimestre.
Al 30 de septiembre, la tesorería bruta de la aerolínea ascendía a 3.000 millones de euros tras el pago de 1.200 millones de euros de deuda (incluido un bono de 850 millones de euros en septiembre), 1.100 millones de euros en gastos de capital y 400 millones de euros en dividendos para los accionistas. La liquidez se ve reforzada por la línea de crédito renovable del grupo, que cuenta con aproximadamente 1.000 millones de euros sin utilizar.
La tesorería neta aumentó a más de 1.500 millones de euros, frente a los 1.300 millones de euros al 31 de marzo, lo que sitúa al grupo en una buena posición para financiar los gastos de capital y amortizar nuestro último bono (1.200 millones de euros) en mayo de 2026 con recursos propios.
Por otro lado, el consejo de administración de Ryanair (en consonancia con la política de dividendos de la empresa) ha declarado un dividendo a cuenta de 0,193 euros por acción, pagadero a finales de febrero del año que viene.
ESTRATEGIA DE CRECIMIENTO Y ENTREGA DE AERONAVES.
Ryanair sigue confiando en su estrategia de crecimiento basada en su flota de aviones Boeing 737 'Gamechangers'. La aerolínea contaba con 204 de estos aparatos a finales de octubre y espera recibir los últimos 6 (de un pedido de 210) antes de la primavera de 2026. Esto facilitará un crecimiento del tráfico del 4% hasta alcanzar los 215 millones de pasajeros en el próximo año fiscal (FY2027).
De cara al futuro, Ryanair ha cubierto aproximadamente el 35% del gasto de capital de su pedido en firme del MAX-10 (150 aeronaves). La aerolínea prevé alcanzar los 300 millones de pasajeros anuales para el ejercicio fiscal 2034, gracias a la ventaja en costes, el sólido balance y la limitación de capacidad que se espera en el sector de corto radio en Europa hasta 2030.
En su estrategia de asignación de capacidad, Ryanair ha reorientado vuelos hacia regiones que incentivan el crecimiento y reducen los impuestos a la aviación, como Suecia, Eslovaquia, Italia, Albania y Marruecos.
Por el contrario, la compañía está desviando capacidad de mercados "poco competitivos y de alto coste" como Alemania, Austria y ciertas regiones de España. La temporada 2026 verá más de 2.500 rutas a la venta, incluyendo nuevas bases en Tirana y Trapani.
La aerolínea que la capacidad de vuelos de corto recorrido en Europa se mantendrá limitada al menos hasta 2030, dado que los dos principales fabricantes de equipos originales siguen "rezagados" en la producción de aeronaves, las reparaciones de los motores Pratt & Whitney continúan siendo un problema para muchos operadores de Airbus, y la consolidación de las aerolíneas europeas se acelera (incluidas Air Europa, SAS y TAP)
"Creemos que las limitaciones de capacidad del sector, junto con nuestra creciente ventaja en costes, un sólido balance, una cartera de pedidos de aeronaves de bajo coste y una resiliencia operativa líder en el sector, facilitarán el crecimiento controlado y rentable de Ryanair hasta alcanzar los 300 millones de pasajeros anuales para el ejercicio fiscal 2034", asegura la aerolínea.
O'Leary criticó duramente a la Comisión Europea y a su presidenta, Ursula von der Leyen, "por no implementar reformas urgentes para mejorar la competitividad de Europa, como la reforma del control de tráfico aéreo y la armonización de los impuestos medioambientales".
PERSPECTIVA Y CAUTELA PARA EL EJERCICIO FISCAL 2026
De cara al ejercicio fiscal 2026, Ryanair prevé que el tráfico aéreo crezca más de un 3%, hasta alcanzar los 207 millones de pasajeros (frente a los 206 millones previstos anteriormente), gracias a las entregas anticipadas de Boeing y la fuerte demanda del primer semestre.
Aunque las reservas anticipadas para el tercer trimestre superan ligeramente las del año anterior, especialmente en los picos de octubre y Navidad, la dirección ha advertido de que se enfrentan a comparaciones tarifarias "más difíciles" en el segundo semestre.
El grupo no ha ofrecido una previsión concreta del beneficio neto para el ejercicio fiscal 2026, si bien ha manifestado que espera "recuperar la totalidad del descenso del 7% en las tarifas del año pasado, lo que debería traducirse en un crecimiento razonable del beneficio neto" para el año.
La aerolínea advierte, no obstante, que el resultado final sigue estando sujeto a riesgos externos adversos, como la escalada de conflictos en Ucrania y Oriente Medio, perturbaciones macroeconómicas y los impactos derivados de las huelgas de controladores aéreos en Europa.