OVIEDO, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los empresarios agrupados en las asociaciones que integran la Mesa de Turismo de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) han constatado un descenso medio de un diez por ciento en la ocupación de sus negocios en Semana Santa de 2012 respecto al año 2011.
Señalan que la calidad de la oferta turística asturiana y las atractivas promociones privadas realizadas no han sido suficientes para que la Semana Santa colmara las expectativas del sector. La duración de las estancias se ha mantenido o disminuido ligeramente lo que, unido la contención de los precios, ha repercutido en una a menor rentabilidad.
Los hoteles urbanos registraron un 70 por ciento de ocupación media entre el jueves y domingo, siendo de un 40 por ciento de lunes a miércoles, en contraste con los hoteles rurales que en su conjunto no llegaron a una ocupación del 40 por ciento entre el jueves y domingo y de un 29 por ciento de lunes a miércoles.
En cuanto a la Restauración, se constata la tendencia de los turistas reducir considerablemente su gasto, con predominio de los menús por encima de la carta de los restaurantes. Ocupación media en comidas 60 por ciento de todo el sector asturiano de jueves a domingo, y 30 por ciento en cena.
TURISMO RURAL.
En Turismo rural, la ocupación de lunes a miércoles fue de un 10 por ciento, pasando a un 80 por ciento entre el jueves y el domingo, con una peor sensación que en años anteriores.
Los Campings de lunes a miércoles registraron una ocupación del 40 por ciento en bungalows, y de un 10 por ciento en parcelas, aumentando entre el jueves y el domingo en un 25 por ciento en parcelas y subiendo hasta un 85 por ciento en bungalows. Y la ocupación de Viviendas vacacionales de jueves a domingo fue del 30 por ciento, un 20 por ciento inferior a la del año pasado.
Finalmente, la Mesa de Turismo de FADE reitera la necesidad de potenciar el Principado de Asturias como destino turístico, incrementar la promoción en los destinos turísticos con conexión aérea con Asturias, intensificar políticas activas para reducir la estacionalidad y agilizar las infraestructuras de comunicación pendientes, como la autovía del Cantábrico y el tren de alta velocidad.
