MADRID, 26 Dic. (OTR/PRESS) -
Cuatro estrena el domingo a las 22.35 horas una nueva aventura de "Desafío en el Himalaya". En el episodio de esta semana, Jesús Calleja confía en que los 6 montañeros novatos con los que comparte esta aventura alcanzarán la cumbre del Pico Sin Nombre. La expedición se encuentra en un punto remoto del Himalaya indio desde el que ya ven la mole de hielo que más de 6.000 metros que escalarán dentro de pocos días. Tolo, Natalie, Miguel Ángel, Silvia, Jonathan y Lidia se han adaptado a la altitud y demuestran día a día sus aptitudes de montañeros. Sólo uno de ellos, el que demuestre las mejores condiciones, ganará la oportunidad de vivir un auténtico Desafío extremo con Jesús Calleja.
La expedición ha pasado su primera noche en la aldea de Photoskar donde han llegado tras una durísima jornada que ha destrozado los pies de los novatos. Tras el susto que les ha dado Tolo, que desapareció de manera imprudente en mitad de la noche, ha regresado la tranquilidad. Jesús Calleja sigue empeñado en que los aspirantes conozcan la cultura local y envía a los chicos a buscarse la vida en Photoskar. Deben procurarse comida y alojamiento en una casa local y, a cambio, trabajarán en las tareas agrícolas. Tolo, Natalie y Miguel consiguen darse la gran vida haciendo uso del dinero de Tolo, que se las apaña para conseguir carne, el manjar soñado tras muchos días de racionamiento. Mientras tanto, el equipo formado por Silvia, Jonathan y Lidia es aceptado en una casa, y la mujer, campesina, no duda en colocarles una cesta de mimbre con la que recogen boñigas de yak, el combustible de su cocina. Tras mandarles ordeñar sus cabras llega lo más insólito; la mujer se desata las trenzas y se descubre el pecho. Quiere que los tres occidentales le hagan una limpieza a fondo de pelo, axilas, pies y uñas. Ellos no han visto en su vida tanta suciedad acumulada.
La expedición se pondrá de nuevo en marcha en su aproximación al Pico sin Nombre. Ascienden un collado de 4.915 metros, el Sirsi La Hinjudog, y llegan al campamento Hanupata. Esta jornada sí pasa dura factura a los aspirantes. Cada vez cuesta más respirar, reaparecen los dolores de cabeza, el cansancio acumulado obliga a avanzar con lentitud y los pies de algunos de ellos muestran heridas profundas con riesgo de infección.