MADRID, 21 Oct. (OTR/PRESS) -
Han recorrido más de 14.500 kilómetros para formar parte de una experiencia única y convertirse en protagonistas de la fusión de las costumbres indígenas con el modo de vida de la civilización occidental: 'Gran Hermano' celebrará este jueves (a partir de las 21.45 horas) una noche que pasará a la historia de sus once ediciones en Telecinco con la entrada en la 'casa espía' de tres miembros de una tribu indígena procedente de la isla de Papúa Nueva Guinea.
Procedentes de Irian Jaya, Yali, el jefe; Filike, su esposa; y Natalis, su ahijado, 'invadirán' la casa de Guadalix de la Sierra para convivir durante dos semanas con los participantes del concurso presentado por Mercedes Milá, que asistirán además a la unificación de la 'casa 11' con la 'casa espía' en una velada en la que Carol y Carolina conocerán la decisión de sus compañeros sobre su continuidad en el programa.
'Gran Hermano' será así, testigo de un intenso intercambio cultural, ya que los inquilinos temporales no viven igual que sus compañeros. Residen en cabañas de madera rodeadas de montañas, paradisíacas cascadas y abundante vegetación; practican la poligamia, aunque curiosamente los matrimonios viven separados, de modo que los hombres custodian a sus hijos adolescentes mientras que las mujeres se hacen cargo de los hijos pequeños y de los animales; el cerdo es su animal de culto, y es respetado y venerado hasta el punto de que sólo es cocinado en ocasiones muy especiales.
Y mientras, y a pesar de que sólo han compartido una semana con ellas, Arturo, Indhira, Toscano y Tatiana tendrán que tomar una decisión crucial que afectará inevitablemente al futuro de Carol y Carolina -las dos últimas habitantes de la 'casa espía'-. Sus compañeros tendrán que pronunciarse sobre quién de las dos debe continuar en el concurso y quién deberá poner punto y final a su aventura. La participante que resulte expulsada abandonará la casa para dirigirse al plató de Telecinco y abordar su paso por el concurso en una entrevista con Mercedes Milá.
De este modo, todos los concursantes definitivos empezarán a vivir juntos en una única vivienda. Una vez que tenga lugar la expulsión de Carol o Carolina, los habitantes comenzarán a visitar el confesionario para participar en una nueva ronda de nominaciones.
