El Hospital Quirón Marbella pionero en Andalucía en la implantación de la somnoesdoscopia

Médicos Hospital Quirón
EUROPA PRESS/HOSPITAL QUIRÓN
Actualizado: martes, 2 abril 2013 21:40

La técnica es ambulatoria, indolora y no reviste riesgos para el paciente.


MÁLAGA, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

Los servicios de Otorrinolaringología y de anestesia del Hospital Quirón Marbella (Málaga) han implantado por primera vez en Andalucía la somnoendoscopia para el diagnóstico y posterior tratamiento del ronquido y síndrome de apnea del sueño. Una técnica ambulatoria, indolora y que no reviste ningún riesgo para el paciente.

Los responsables de la puesta en marcha de esta técnica son el servicio de otorrinolaringología, dirigido por los doctores Juan Carlos Casado y Carlos O'Connor, y el servicio de anestesia, dirigido por el doctor Blas Rodríguez del Hospital Quirón Marbella.

El síndrome de la apnea obstructiva del sueño (SAOS), se produce por la oclusión intermitente y repetitiva de la vía aérea superior durante el sueño, lo que origina una interrupción completa --apnea-- o parcial --hipopnea-- del flujo aéreo. La forma habitual de diagnosticar la apnea es a través de exploración en la consulta del otorrinolaringólogo y a través de la polisomnografía, coloquialmente conocida como estudio del sueño, que en ocasiones no resultan definitivas en el diagnóstico de algunos casos complejos de apnea.

La técnica de la somnoendoscopia se aplica al paciente tras producirle un estado de sueño inducido farmacológicamente por parte del anestesista, para la posterior exploración de la zona laríngea a través de la introducción de un fibrobroncoscopio, que permitirá a los otorrinolaringólogos estudiar las zonas que producen el colapso y por consiguiente el proceso de ronquidos y apnea.

Este procedimiento, según ha apuntado el doctor Casado en un comunicado "permite objetivar qué zonas son las responsables del colapso faríngeo que quedan ocultas en la exploración rutinaria con el paciente despierto, y posteriormente decidir de forma óptima, cuál es la mejor terapia para cada paciente. Hasta ahora, esta prueba solo estaba disponible en algunos centros muy especializados, y es una gran satisfacción poder ofertarla en nuestro hospital", ha destacado.

La mejor indicación para este procedimiento, según ha explicado el doctor O'Connor, "son los pacientes en los que la cirugía no ha dado resultado, o aquellos con discrepancias en el examen de consulta y el estudio del sueño, pacientes que no toleran la presión positiva continua en la vía aérea que presentan sintomatología no acorde con los hallazgos de consulta".

"Creemos que con este procedimiento podemos ser más efectivos a la hora de elegir la terapia para tratar a cada paciente y si esta ha fallado, conocer el motivo" ha apuntado O'Connor. "Esta técnica se hace de forma ambulatoria por lo que no requiere ingreso, es indolora y no reviste riesgos para el paciente", ha concluido el doctor.

Según ha explicado el doctor Rodríguez, "la somnoendoscopia permite la visualización de la faringe de un paciente al que se le ha inducido el sueño farmacológicamente. De este modo, se pueden diagnosticar las zonas causantes de la vibración y colapso de cada paciente con roncopatía crónica. Al paciente se le induce el sueño de la forma más fisiológica posible y cuando empieza a roncar, procedemos a objetivar a través de un control visual directo qué zonas son las responsables del colapso", ha apostillado.

SÍNDROME DE LA APNEA OBSTRUCTIVA DEL SUEÑO

Se calcula que entre un dos y un seis por ciento de la población mundial padece SAOS. En España, el número de personas que padecen el Síndrome de la Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS) está entre 1.200.000 y 2.150.000, sin embargo, sólo se ha diagnosticado y tratado a menos del 10 por ciento. Es decir, nueve de cada 10 pacientes con SAOS no lo saben.

El SAOS, es un problema de salud pública. La hipersomnia diurna --adormecimiento diurno--, tiene impacto familiar, laboral y social; impide a quien la padece desarrollar una vida normal, además de los problemas en las relaciones personales, el riesgo de padecer accidentes de tráfico y otros problemas de índole profesional, como bajo rendimiento laboral o altos índices de absentismo.