LEÓN, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ballet de Camagüey de Cuba representará hoy a las 21,00 horas en el Auditorio Ciudad de León la obra de Adolphe Adam 'Giselle', con la coreografía de Jules Perrot y Jean Coralli, una actuación que forma parte de la gira que realiza la compañía por el territorio español.
La obra fue estrenada en 1841 en la Ópera de París y desde entonces forma parte del repertorio de casi todas las compañías del mundo y de todas las bailarinas clásicas que aspiran a la "perfección técnica" y a la "consagración". Así, se pondrá en escena este ballet de la culminación del Romanticismo y reflejo de una sociedad que ansiaba la belleza y la armonía.
El Ballet de Camagüey fue fundado en la provincia cubana del mismo nombre el 1 de diciembre de 1967. Es una compañía de corte clásico, la única de este tipo en el país cubano junto al Ballet Nacional de Cuba, según informó el Ayuntamiento de León en una nota recogida por Europa Press.
Camagüey es una ciudad que tiene tradición de ballet clásico desde los primeros años del siglo XX. Desde 1997 el Ballet de Camagüey está dirigido por Regina María Balaguer Sánchez y se nutre tanto de graduados de la Academia Vicentina de la Torre, de Camaguey, como de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba.
En el momento actual la compañía cuenta con un total de 60 bailarines, con una edad media de 20 años, todos graduados de las escuelas profesionales de ballet y con un amplio dominio de la técnica.
La obra narra la historia que sucede en una pequeña aldea, donde Giselle, una joven campesina, se enamora del príncipe Albrecht, un noble que la engaña con disfraces. El guarda bosques, Hilarión, enamorado de Giselle, intenta avisar a la muchacha porque Albrecht tiene novia, Bathilde.
Cuando Giselle se da cuenta del engaño pierde la razón y muere y durante esa noche, entre las tumbas del cementerio, aparecen las 'willis', espectros de novias antes de casarse con las que baila a la luz de la luna. Estos espectros se encuentran con Hilarión y lo introducen en su círculo, pero la aparición de Giselle le protege de la furia de las 'willis'.
