BARCELONA, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
Llach (JxSí) advierte que el Gobierno catalán sancionará a funcionarios que incumplan leyes de ruptura
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha defendido este miércoles sin matices al diputado de JxSí Lluís Llach, pese a las declaraciones de este último que le han puesto en el centro de la polémica por haber dicho que el Govern sancionaría a los funcionarios que incumplieran las leyes de 'desconexión' de Catalunya con el resto de España.
En una intervención ante el pleno del Parlament durante la sesión de control al presidente, Puigdemont ha tildado de injustos e ignorantes a los que acusan al diputado de coacciones, y ha remarcado que la biografía de Llach acredita que fue víctima de "censura, detención, prohibición y exilio", una intervención que ha acabado con una fuerte ovación de todo el grupo a Llach.
El presidente catalán no ha aclarado si la Generalitat tiene previsto sancionar a los trabajadores públicos que no apliquen las leyes de 'desconexión' cuando estas se aprueben eventualmente por el Parlament, pero ha zanjado que las leyes de la Cámara catalana se tienen que "cumplir".
Ante las críticas de PP y C's al Govern por las palabras de Llach, Puigdemont se ha defendido asegurando: "¿No están sugiriendo que el Govern mire hacia otro lado cuando un funcionario no haga caso del cumplimiento de las leyes?. Ustedes no paran de repetirnos que las leyes están para cumplirse".
También ha criticado que le parece extraño que critiquen a Llach sin hacer antes autocrítica de casos como cuando un presidente autonómico del PP --Juan José Imbroda, de Melilla-- trató de "pirados" a los independentistas, o cuando el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero aseguró que los catalanes tenían perjuicios contra Susana Díaz por ser andaluza y mujer.
Además, Puigdemont ha criticado que Llach fue perseguido por gente que empezó su carrera política "cuando gobernaba Franco" y cuando la acabó formaban parte del PP, citando a Rodolfo Martín Villa, un comentario que ha valido la protesta de los populares ante la presidenta de la Cámara, Carme Forcadell.
El presidente catalán también ha asegurado que no acepta críticas de Cs al Govern por los funcionarios, ya que ha acusado al partido de Inés Arrimadas de "poner bajo sospecha" siempre a los trabajadores públicos de enseñanza que aplican la inmersión lingüística y a los periodistas de los medios públicos.
CRÍTICAS A LLACH
El líder del PP catalán, Xavier García Albiol, ha criticado que con sus polémicas declaraciones Llach "ha sacado a pasear 'L'estaca", y ha reclamado al diputado que deje su acta en el Parlament como la dejó Santi Vidal en el Senado por otras polémicas declaraciones sobre el proceso soberanista.
Albiol ha proclamado que las leyes de desconexión son "un golpe de Estado literal", y ha acusado al Govern de estar sumido en una dinámica de ocurrencia tras ocurrencia como cuando el vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, contempló proclamar la independencia de forma unilateral si no se podía celebrar un referéndum.
Arrimadas ha acusado a JxSí de amenazar a los trabajadores públicos para seguir impulsando el proyecto soberanista y ha lamentado que Puigdemont haya avalado a Llach: "Es vergonzoso. Usted debería defender a los funcionarios y no al señor Llach".
La líder de Cs ha dicho que, más allá de las palabras de Llach, los funcionarios catalanes han sufrido grandes recortes por parte de la Generalitat que aún no han recuperado y ha exigido a Puigdemont: "Págueles lo que les debe y no les amenace si no les quiere seguir en su obsesión separatista".
También el líder del PSC, Miquel Iceta, se ha referido a este asunto para rogar al Govern que no amenace "a los funcionarios y a todos con el choque de legitimidades que se derivará en esta triquiñuela que nos afectará a todos".
