Ya había estrellas 600 millones de años después del 'big bang'

NASA/Dana Berry
Actualizado: miércoles, 28 octubre 2009 20:00

MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

Las estrellas ya existían cuando el Universo tenía sólo 600 millones de años, después de producirse el denominado 'Big Bang' o 'Gran Explosión' que lo originó, aproximadamente un 5 por ciento de su edad actual. Es la principal conclusión que se extrae del análisis que un equipo internacional de investigadores, entre ellos españoles, ha realizado de la explosión de rayos gamma GRB 090423, la más lejana detectada hasta la fecha. La revista 'Nature' publica esta semana dos trabajos en los que los investigadores describen sus descubrimientos.

En abril de este año el satélite SWIFT detectó la emisión de rayos gamma de una estrella que explotó hace 13.000 millones de años, la estrella más lejana y antigua conocida hasta la fecha. Entonces, según explicó a Europa Press Alberto Castro-Tirado, firmante de uno de los estudios junto a Javier Gorosabal y ambos del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), "nuestro telescopio robótico de la estación astronómica española BOOTES-3 en Nueva Zelanda, inaugurado en febrero de este año, fue el primero en apuntar a esta zona del cielo, un minuto después de recibir la alerta de la explosión desde el satélite".

Castro Tirado añade que el descubrimiento supone la detección del objeto más lejano del Universo hasta la fecha y señala dónde hay que buscar la galaxia más lejana conocida. En realidad, esta galaxia donde se ha producido el cataclismo estelar sólo será perceptible cuando se lance el sucesor del Hubble, el Telescopio Espacial J. Webb, dentro de aproximadamente 5 años. "Hasta entonces, habrá que esperar y ver si somos capaces de detectar otros fenómenos tan distantes como GRB 090423", apunta el investigador.

El descubrimiento se realiza dentro del contexto del estudio de uno de los fenómenos más energéticos del Universo: las explosiones de rayos gamma. Estos grandes estallidos de luz son el resultado de la explosión con la que finaliza su vida una estrella gigante. Su colapso da lugar a un agujero negro o, a veces, a una estrella de neutrones. Al mismo tiempo, por un proceso que los investigadores aún no comprenden bien, dos chorros de gas perforan la estrella y la materia sale eyectada hacia el espacio en direcciones opuestas, liberando una gran cantidad de energía.

Los dos equipos de científicos que publican su trabajo en 'Nature', dirigidos respectivamente por Nial Tanvir, de la Universidad de Leicester en Reino Unido, y Ruben Salvaterra, del Instituto Nacional de Astrofísica de Italia, midieron el corrimiento al rojo del objeto en un valor de alrededor del 8,2, lo que significa que el estallido se produjo cuando el Universo tenía menos de un 5 por ciento de su edad actual.

El registro previo de una galaxia en el corrimiento al rojo era del 6,9, lo que se corresponde con una edad 150 millones de años más joven que GRB 090423. Según los autores, más allá de romper un record, la edad del recién descubierto objeto abre una ventana a una era cosmológica que no había sido accesible a la observación. "Por medio de estos objetos vamos a poder estudiar las galaxias más distantes del Universo y el medio que existen en la línea de visión hasta nosotros", añade Castro-Tirado.

Hasta el momento, los investigadores pensaban que la aparición de las primeras estrellas se produjo cuando el universo tenía entre 200 y 400 millones de años. Esta explosión, que por sus características no corresponde a una estrella de primera generación, de las que aún no se conoce ninguna, parece confirmar la idea.

Según explica Alberto Fernández Soto, del Instituto de Física de Cantabria (CSIC-Universidad de Cantabria) y firmante en el segundo de los artículos, "es el objeto más antiguo jamás observado. El mero hecho de que lo veamos confirma que en aquella época ya había estrellas, algo que hasta ahora era una hipótesis sin confirmar". Es más, Fernández Soto concluye que "la aparición de objetos como este quiere decir que la formación de los cuerpos celestes fue más rápida de lo que se pensaba".

Según los científicos, a medida que se detecten más explosiones de rayos gamma de estas eras iniciales del Universo los astrónomos serían capaces de seguir el progreso que condujo al desarrollo del medio intergaláctico que observamos en la actualidad.