MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
Depender de subvenciones y políticas públicas es uno de los principales puntos débiles del modelo de los teatros de ópera españoles, según ha manifestado este martes Philippe Agid, autor, junto a Jean-Claude Tarondeau, del libro 'La gestión de la ópera' cuya versión en castellano ha editado Ópera XXI (Asociación de Teatros, Festivales y Temporadas Estables de Ópera en España).
Escrito en 2010, esta versión castellana publicada por Planeta, se ha presentado en Madrid coincidiendo con las Jornadas de Ópera XXI. El libro realiza un estudio comparativo a nivel internacional y recoge además un capítulo específico encargado a Agid sobre el contexto de la gestión de estas instituciones de ópera en España.
"La ópera en España está sufriendo mucho debido a los recortes y al sistema fiscal", ha manifestado este experto que fue director adjunto de la Ópera de París entre 1995 y 2001.
Agip ha recordado que existen tres modelos en el mundo de la gestión de la ópera: el norteamericano, que fomenta las donaciones privadas y tiene un público muy comprometido; el alemán, con una dependencia gubernamental muy alta en la que la taquilla sólo representa en torno al 15 por ciento; y el de ciudades como Londres, París, Barcelona, Madrid o Milán con un sistema "más equilibrado" en el que la taquilla representa alrededor del 30 por ciento.
Según Philippe Agip, en España, al igual que en Estados Unidos, se produjo un fuerte desarrollo de la música tras la II Guerra Mundial y hay también un "público muy comprometido" al tiempo que se "externalizan buena parte de los recursos", lo que considera una "ventaja" frente al modelo alemán.
VALENTÍA ANTE LA CRISIS
Agip, que ha asistido en el último año a numerosos espectáculos de ópera de diferentes teatros españoles, ha confesado el "shock" que le produjo ver cómo en poco tiempo la situación en el país "se ha deteriorado a gran velocidad" (recorte de subvenciones, despidos, menos óperas). "Desde fuera impresiona ver este panorama pero la valentía de la gente constituye un activo muy fuerte", ha recalcado.
Junto a ello, este experto ha valorado también la "gran profesionalidad" de los responsables artísticos y la "capacidad de gestión". A esto ha sumado "la fuerte tradición musical" que tiene España.
Pero en la actual situación económica, Agip considera que hay dos cuestiones imprescindibles: No depender tanto de subvenciones y políticas públicas y aprobar una Ley de Mecenazgo que, en su opinión, "será estupenda" para revertir esta coyuntura de los teatros de ópera.
En este sentido, Philippe Agip reconoce que la situación es "muy difícil" y el futuro "impredecible" y que el Gobierno "no tiene otra alternativa" que hacer lo que está haciendo. "Si se está recortando en educación y sanidad no podemos pensar que la ópera se librará de esto. Cada uno debe arrimar el hombro", ha indicado incidiendo en la necesidad de mayores "facilidades fiscales", como ya ha hecho Francia. "Ninguna compañía puede establecer un presupuesto equilibrado sólo con la taquilla. La ópera necesita el patrocinio o la subvención".
IVA Y MECENAZGO
Por su parte, Remedios Navarro, presidenta de Ópera XXI y directora general del Teatro de la Maestranza de Sevilla, considera que los teatros aún tienen "energía" para afrontar el año 2013, que se avecina muy duro. "Pero necesitamos dos herramientas: revertir el actual IVA del 21% al 10% y una Ley de Mecenazgo", ha apuntado recordando que el Gobierno ha declarado que a finales de 2013 o principios de 2014 se replanteará esa reducción del IVA.
Joan Francesc Marco, director del Liceo de Barcelona, considera que el primer paso será "seguir un modelo mixto similar al francés" mientras que Ignacio García-Belenguer, director general del Teatro Real, ha apuntado que mientras continúe la actual crisis económica, a los gestores les tocará "diseñar estrategias" que palien la situación sin perder de vista "la necesaria calidad artística".
