MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno calcula que las medidas previstas en el anteproyecto de Ley de Economía Sostenible para reducir la morosidad permitirán, en un horizonte hasta 2020, un incremento adicional del PIB del 0,25% hasta 2020, del 0,1% en el caso del empleo, y un aumento de la inversión del 0,5%.
Según precisa el texto remitido a los órganos consultivos la pasada semana, los principales beneficiarios serán sin duda las empresas proveedoras, especialmente las pymes, que verán acortarse los períodos de cobro y dispondrán además de nuevas herramientas para hacer frente a los casos de morosidad, con mayor agilidad y menor coste.
Así, los cálculos del Ejecutivo prevén que la obligación de pago en 60 días para las empresas, cuando el proveedor sea una pyme o autónomo generará un ahorro financiero neto --diferencia entre la disminución de costes financieros para pymes y el aumento para grandes empresas-- de unos 2.485 millones de euros al año.
Además, la reducción del plazo de pago de las administraciones de 60 a 30 días generará un ahorro financiero para las empresas de unos 759 millones de euros al año.
Asimismo, el texto apunta que, "teniendo en cuenta especialmente los efectos sobre las condiciones de competencia, las medidas deben tener efectos positivos". Según explica, "con estas medidas se pretende restringir el uso indebido del crédito del proveedor como instrumento de financiación de las empresas o de las administraciones públicas", que "se basa con frencuencia", añade, "en las asimetrías de poder de mercado entre empresas o administración cliente y proveedor".
IMPACTO DE LA SIMPLIFICACIÓN ADMINISTRATIVA.
Por otro lado, el anteproyecto de Ley estima que la reforma para agilizar la constitución de empresas y la adopción de actos societarios permitirá que un 66,66% de las sociedades limitadas puedan constituirse en menos de cinco días con un coste reducido y un 23,33% en un sólo día.
Más allá de estas cifras, el Gobierno espera que la estrategia diseñada hasta 2020, en la que se incluye la Ley de Economía Sostenible, permita reducir en un 50% las cargas administrativas, lo que generaría un aumento del PIB del 0,6%.
Eso sí, estas previsiones descansan en un escenario de ausencia de medidas, con mejoras en los salarios reales, moderación de la inflación y de mejora transitoria del saldo exterior.
Además, el Gobierno estima que de cumplirse el objetivo de incrementar la inversión en I+D hasta el 3% del PIB en 2020, supondría un crecimiento económico adicional del 0,79%, del 0,63% en el caso del consumo y del 0,79% en el de las exportaciones.
