Crónica O.Próximo.- Israel vive un momento sin precedentes al negociar la paz en los frentes sirio, palestino y libanés

Actualizado: lunes, 16 junio 2008 21:10

Se compromete con Damasco a continuar con el diálogo, la tregua en Gaza parece cercana y dos soldados podrían ser liberados por Hezbolá

JERUSALÉN, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno israelí del primer ministro Ehud Olmert, en horas bajas por su implicación en un escándalo de corrupción, atraviesa un momento dulce en sus negociaciones de paz en todos los frentes. Así, con los palestinos, Hamás dijo hoy que el acuerdo para una tregua en la Franja de Gaza está cerca, mientras que parece inminente un intercambio de presos con Hezbolá para la liberación de dos soldados hebreos secuestrados. Por último, las negociaciones con Siria también parecen ir por el buen camino y se baraja un eventual encuentro entre Olmert y el presidente Bashar al Assad en julio.

En realidad, no se sabe mucho de los términos de las negociaciones que está manteniendo con los tres frentes, únicamente fuentes oficiales de las distintas partes han hablado en algunas ocasiones de las condiciones que impone uno u otro lado. Y en algunos casos, esas condiciones presentan planteamientos nunca antes aceptados.

Tal es el caso de los Altos del Golán, territorio que Israel se anexionó tras la Guerra de los Seis Días contra Siria en 1967. Damasco considera la devolución de este punto estratégico como incontestable para llegar a un acuerdo de paz con Tel Aviv.

Por su parte, el Gobierno israelí ha reiterado en varias ocasiones que cualquier acuerdo dependerá de la distancia que tome Siria con respecto a sus aliados y a su vez enemigos de Israel: Irán, la guerrilla chií libanesa Hezbolá y el grupo palestino Hamás, que controla la Franja de Gaza desde hace un año.

De estos "enemigos", Israel negocia actualmente con los dos últimos, dado que los dos grupos mantienen secuestrados desde hace dos años a soldados hebreos. En el caso de Hezbolá, se habla de un intercambio de prisioneros que podría culminar la semana que viene, mientras que con Hamás la negociación abarca más cuestiones, como el fin del bloqueo sobre Gaza o la apertura de las fronteras. A estos contactos hay que añadir los que siguen manteniéndose con la Autoridad Palestina.

SIRIA

El Gobierno israelí lleva un año negociando indirectamente un acuerdo de paz con Damasco que pondría fin a más de 40 años de frío enfrentamiento, pero no fue hasta el mes pasado cuando se informó de estos contactos, con Turquía como mediador. Hoy mismo, fuentes oficiales israelíes citadas por la prensa local hablaron de un posible encuentro cara a cara entre el primer ministro israelí y el presidente sirio en la Cumbre de la Unión por el Mediterráneo que se celebrará en julio en París, aunque por ahora se trata sólo de una propuesta hebrea.

Fue después el propio presidente israelí, Simon Peres, quien incluso emplazó a esta reunión. "Si los sirios buscan realmente la paz, entonces debería celebrarse un encuentro". Tal encuentro podría tener lugar en Jerusalén o en Damasco, dijo Peres, pero consideró "absolutamente necesario" romper la barrera psicológica levantada entre ambas partes.

No obstante, la delegación israelí no es optimista sobre la posibilidad de que Al Assad acceda a reunirse con Olmert: "En Israel consideran que Al Assad necesitaría asegurarse primero algo concreto".

Mientras, fuentes oficiales turcas informaron a Reuters de que la segunda ronda de contactos entre Tel Aviv y Damasco ya ha finalizado, y resaltaron que ambas partes han acordado un calendario para las que serán tercera y cuarta ronda, aunque no facilitaron más detalles de cuándo se producirán.

HEZBOLÁ

Otro frente que Israel mantiene abierto actualmente es el de las conversaciones con la milicia libanesa Hezbolá. En este caso, se trata de un intercambio de prisioneros que comenzó el pasado 1 de junio cuando el grupo entregó al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) los restos mortales de varios soldados israelíes fallecidos en la guerra del verano de 2006, mientras que Tel Aviv puso en libertad a Nesim Naser, ciudadano israelí, de origen judío y convertido al Islam.

Hezbolá espera ahora la liberación de, entre otros presos, Samir Kuntar, terrorista libanés que lleva 30 años en una prisión israelí por un atentado en Nahariyah que acabó con la vida de cuatro personas. Kuntar sería "canjeado" por los soldados israelíes Ehud Goldwasser y Eldad Regev, intercambio que, según fuentes militares hebreas, podría producirse entre el 20 y el 25 de este mes, según una información del diario libanés 'As Safir'.

Paralelamente a esta noticia, fuentes de Naciones Unidas declararon al periódico, también libanés, 'Al Akhbar' que el intercambio podría tener lugar a finales de la semana que viene y que el acuerdo se alcanzó tras las negociaciones mantenidas entre Israel y Hezbolá con mediación de Alemania.

El padre de uno de los dos soldados también señaló hoy que un negociador israelí le había informado de que el intercambio de prisioneros está próximo a concretarse. "Tuvimos una reunión con (el enviado) Ofer Dekel y nos informó, no sobre los detalles, pero nos dijo en términos generales que un acuerdo está a punto de alcanzarse", declaró Zvi Regev, padre de Eldad Regev, a Radio Israel.

Israel llevó adelante una ofensiva de 34 días en Líbano después de que Regev y Goldwasser fueron secuestrados en una incursión de Hezbolá, pero luego iniciaron conversaciones indirectas para rescatarlos, aunque persisten dudas sobre si están vivos.

Además, el periódico 'Al Sharia al Awsat' informó de que la familia de Kuntar ya ha empezado a prepararse para su "inminente regreso" a Líbano como parte del posible acuerdo. Sin embargo, la confusión no cesa con respecto a este tema, ya que ayer el abogado del terrorista declaró al diario israelí 'Haaretz' que su cliente no ha recibido ninguna información sobre una posible e inminente liberación.

HAMÁS

Si en las negociaciones anteriores la mediación corresponde a Turquía, en el caso de Siria, y a Alemania, en el caso del intercambio con Hezbolá, las conversaciones indirectas para un alto el fuego con el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) corren a cargo de Egipto.

En este caso, el diálogo siempre se ha visto estancado por las exigencias de uno y otro bando, que no parecen querer dar su brazo a torcer. Por un lado, Tel Aviv exige el cese inmediato del lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza hacia el sur de Israel por parte de milicianos palestinos así como la liberación del soldado Gilad Shalit, secuestrado desde hace dos años. Por otro, Hamás reclama la apertura de los pasos fronterizos y el fin del bloqueo que mantiene Israel desde que el movimiento tomó el control de este territorio hace ahora un año.

En numerosas ocasiones, la delegación negociadora israelí ha manifestado que el diálogo estaba estancado debido a la intransigencia de Hamás. Sin embargo, el primer ministro del Gobierno 'de facto' en la Franja, Ismail Haniyeh, señaló hoy que se divisa un buen final de las conversaciones, afirmación también manifestada por un responsable de la delegación palestina.

"Las negociaciones que están en proceso en Egipto sobre la tregua se acercan a un final, un final que va a cumplir las aspiraciones del pueblo palestino, un levantamiento del bloqueo, la apertura de los pasos y el final de la agresión", explicó Haniyeh, quien añadió que Hamás está "comprometido" con las demandas que exige el posible acuerdo, "una tregua recíproca y simultánea que empiece en Gaza y se extienda a Cisjordania".

Mark Regev, el portavoz de Olmert, subrayó la semana pasada que el Gobierno está dando "una oportunidad muy seria a la iniciativa de los egipcios, pero remarcó que el Ejército está preparado en caso de que la iniciativa fracase, señalando que la incierta situación de la política interior israelí por las acusaciones de corrupción contra Olmert no impedirá que se lance una ofensiva si fuera necesario.