MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Exteriores y Expatriados de Siria ha criticado este miércoles a la Liga Árabe por su decisión de invitar a la Coalición Nacional de Fuerzas Opositoras y de la Revolución Siria (CNFORS) a que ocupe el puesto dejado libre por el Gobierno sirio, después de que la organización suspendiera la pertenencia del Ejecutivo de Bashar al Assad en noviembre de 2011 por la violenta represión de las protestas en su contra.
Así, ha destacado que "la Liga Árabe continúa violando su carta (fundacional), su sistema interno, sus principios y sus objetivos al garantizar un asiento a una parte específica de la oposición siria que ha llamado a la intervención extranjera desde el inicio de la crisis en el país, incluso a expensas del derramamiento de sangre de sirios inocentes".
En este sentido, ha enumerado cinco principios que Damasco seguirá con el objetivo de hacer frente a los "esfuerzos internacionales" para resolver la crisis en Siria, según ha informado la agencia estatal siria de noticias, SANA.
"La Liga Árabe ha elegido ser una parte sesgada en beneficio de agentes árabes, regionales e internacionales que intentan desencadenar una intervención militar extranjera en la crisis, lo que daña toda solución política basada en el diálogo nacional y anima a la oposición y a los grupos terroristas que trabajan para escalar la crisis", ha indicado en primer lugar.
Posteriormente, ha agregado que el organismo regional "se ha convertido en rehén de la política de algunos países del Golfo, que son Qatar y Arabia Saudí, por lo que no puede ser una parte que ayude a encontrar una verdadera solución política basada en la voluntad de la gran mayoría de los sirios".
"Por ello, Siria rechaza que la Liga Árabe, a la luz de sus políticas sesgadas y negativas, juegue papel alguno o tenga representación en cualquier plan internacional que busque una resolución pacífica a la crisis", ha valorado.
ARMAR A LOS REBELDES: UNA "AGRESIÓN"
En tercer lugar, Damasco ha subrayado que la decisión expresada este miércoles por el organismo para permitir que cada uno de sus miembros pueda ofrecer todo tipo de ayuda de autodefensa, incluida militar, para respaldar la resistencia del pueblo sirio y del Ejército Libre Sirio (ELS), "demuestra que los emiratos del dinero, el petróleo y el gas son herramientas que controlan la acción común árabe para alejarla del verdadero enemigo que ocupa las tierras (en referencia a Israel)".
Asimismo, ha manifestado que "atacar a Siria bajo el paraguas de las decisiones de la Liga Árabe revela que actores árabes, principalmente Qatar y Arabia Saudí, encabezan estos esfuerzos de sabotaje", al tiempo que ha recalcado que el llamamiento a entregar armamento a "grupos terroristas" constituye "una agresión, tal y como está descrita por las resoluciones de la Asamblea General de Naciones Unidas".
Por último, el Gobierno sirio ha destacado que "las posiciones de la Liga Árabe y algunos cuasi-estados árabes anteriormente mencionadas no disuadirán a Damasco de continuar su cooperación positiva con los esfuerzos internacionales constructivos ni de seguir llevando a cabo su tarea nacional para imponer la seguridad y la estabilidad en todo el país".
Qatar ha liderado desde hace meses los esfuerzos para contribuir a la lucha de los rebeldes opositores. Enfrente, ha tenido a Líbano, Irak y Argelia, que se han negado a secundar las partes del documento final relacionadas con el conflicto sirio.
El Gobierno sirio denunció en noviembre de 2011 la decisión de la Liga Árabe de suspenderle temporalmente del organismo, ya que una decisión de ese tipo debía ser tomada por unanimidad. Sin embargo, Siria, Yemen y Líbano votaron en contra, mientras que Irak se abstuvo.
Naciones Unidas calcula que desde marzo de 2011, cuando comenzó el levantamiento popular contra el Gobierno de Bashar al Assad, unas 70.000 personas han muerto a causa de los combates entre las fuerzas gubernamentales y rebeldes.
El Gobierno atribuye gran parte de las víctimas a los grupos terroristas que actúan en el país árabe --según ha denunciado insistentemente-- con la financiación y el apoyo material de Arabia Saudí, Qatar y Turquía, entre otros.
