MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, anunció hoy que la reinserción de los menores infractores en la región a través de la Agencia para la Reeducación y la Reinserción del Menor Infractor (ARRMI) ha alcanzado el 89 por ciento, con lo cual, señaló, sitúa a la Comunidad en la senda de la "reincidencia cero".
En sede parlamentaria, Granados celebró en este sentido que el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, haya puesto como ejemplo en materia de reinserción de menores a la Comunidad de Madrid entre todas las comunidades y que, además, les haya subido "un punto" puesto que ha hablado que el porcentaje de reinserción es del 90 por ciento. "Estoy más que satisfecho", apuntó.
Durante su intervención, el consejero explicó que en la actualidad hay once centros de ejecución de medidas judiciales, de los cuales, tres de ellos están dirigidos por personal de la Comunidad de Madrid frente a los ocho restantes en manos de fundaciones y asociaciones. En este punto, la diputada del PSOE Carmen García Rojas criticó el elevado número de centros concertados que "se llenan los bolsillos".
Granados explicó que en Madrid estos centros que están gestionados por empresas privadas, en comunidades como Andalucía, se "llenarán los bolsillos más", puesto que de 17 centros sólo hay uno privado, frente a los tres de once de Madrid. En concreto, especificó que en la Comunidad hay 476 plazas donde se desarrollan programas específicos de intervención.
No obstante, reconoció que este número de plazas se reducirán en uno, a 475, tras el cierre del centro 'Rosales', a petición del Ministerio de Interior, y la apertura de uno nuevo, el centro 'José de las Heras', donde se aplicará el programa específico de paternidad responsable, padres adolescentes y conductas violentas.
"Estas plazas tienen el objetivo de reincidencia cero y estamos cerca de cumplirlo", manifestó Granados, quien señaló que en la Comunidad se ha optado por "un modelo de centro de ejecución de medidas judiciales especializadas en función de la edad del menor y del tipo de delito o infracción cometido. Además, añadió que el Gobierno ha sido pionero en acoger menores que han atentado contra sus padres, "lo que a contribuido a que se haya reducido su reincidencia al 1 por ciento".
PROGRAMAS PIONEROS
También destacó otros programas pioneros dirigidos a menores que han cometido agresiones sexuales, el programa de intervención con madres gestantes e hijos, o los programas de intervención sobre menores con problemas de drogodependencias. Asimismo, cuentan con un área de inspección, que controlan el funcionamiento de los centros, tanto de personal público como concertado.
"Queremos que no sea tiempo perdido para los menores, sino un lugar de educación", añadió Granados, quien apuntó que el "secreto" de ser modelo para muchos países de Europa que piden consejos e información al Gobierno autonómico, radica en los más de mil profesionales, "una estructura suficiente dedicada en cuerpo y alma por su elevada formación y su extraordinaria vocación de conseguir que ni un sólo joven se pierda".
La diputada socialista, por su parte, manifestó su alegría por que Rubalcaba haya puesto a Madrid como ejemplo de reinserción pero señaló que seguramente esta felicitación "se basa en datos que han suministrado el Gobierno regional, basados en un estudio de la Agencia con una muestra de un año". En este punto, señaló que para que un estudio sea fiable se necesita una muestra, como mínimo, de cinco años.
También pidió a Granados que, como miembro del Consejo de Gobierno, se ponga a trabajar con otras consejerías como la de Familia y Servicios Sociales, Sanidad o Educación para fomentar la prevención, sobre todo, teniendo en cuenta, por ejemplo, el auge de las bandas juveniles.
En cuanto al servicio de inspección, García Rojas señaló que sólo hay una persona registrada, que ella conozca, y se preguntó qué hacen las personas contratadas por las empresas porque la información que tratan, relacionada con los menores, es "sensible". Asimismo, quiso saber cuánto cuestan las plazas que se quedan libres, como en el centro Teresa de Calcuta, donde se estima que cada una sale a 3.800 euros.
En este punto, Granados reconoció desconocer cuánto puede costar una plaza vacía pero señaló que la gestión de esta tiene que costar "algo parecido" a una plaza llena , y es que, según indicó, la disponibilidad 24 horas de una plaza (no se sabe cuando un juez de menores va a necesitar una) "cuesta mucho dinero y el educador está tanto para dos menores como para tres".
